1/10/09

Un líder y el sueño de Llorente

Es tal el momento que atraviesa el Valencia que en absoluto resulta difícil imaginar que Manuel Llorente anoche tuviera un sueño. Más que sueño debió ser un anhelo. Los compromisos de mañana, en Mestalla, y del domingo, en Santander, pueden y van marcar el futuro del equipo, y al presidente no le llega la camisa al cuerpo. Demasiados baches en los primeros kilómetros del largo viaje.

Llorente, en su fantasía, retrocedió en el tiempo hasta unas fechas en las que él todavía no era el mandamás, pero como si lo fuera, y el equipo aún no había ganado nada, pero estaba en el camino de conseguirlo. Esa ilusión se enmarca en los últimos días de marzo de 2002. Entonces, tras una prolongada ausencia por lesión, Rubén Baraja regresó a las alineaciones del equipo para convertirse en el mecanismo propulsor, en el sherpa que condujo al Valencia hasta a la cima de la Liga.

El sueño de Llorente es el mismo que tienen muchos valencianistas. Recuerdan al Pipo que, claro, con algunos años menos, supo convertirse en un líder decisivo para el asalto al campeonato. Ahora, el jugador castellano, repuesto de la rotura muscular que sufrió el pasado verano durante el trofeo Carranza, está en condiciones de reaparecer y volver a rendir. Además de que en forma resulta una garantía y asume responsabilidades, es la alternativa natural y necesaria del argentino Ever Banega, que en varias oportunidades ha demostrado que también sabe echarse al equipo a la espalda.

El Valencia necesita un líder y está claro que no puede ni debe funcionar a golpes de corazón, aunque en el ataque David Villa, rodeado de varios artistas con galones, sea una garantía, el killer que acongoja a los rivales. Sin embargo estamos hablando de un equipo, y un bloque necesita de todos. De unos más que otros, es evidente. Por eso hay que esperar que la incorporación de un futbolista de calidad y experiencia como Baraja sume, y que el sueño de Llorente y de los valencianistas no se convierta en una quimera.

4. (Las Provincias, 30 de septiembre de 2009)

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