29/6/11

Mata tiene la palabra

Nada que ver con la música de Melendi ni con el cliché de las películas de sicópatas. Pero sabemos qué hicisteis el último verano y de nuevo estamos a vueltas con el futuro de Mata.
La historia se repite, aunque al asturiano esta vez le han salido más novios. No sólo es el Barça y el hechizo de Guardiola, ni el supuesto interés del Madrid, que dicen incluiría a Pedro León en el negocio. Después del Europeo, el caché de los sub-21 se ha desbordado como la espuma de la cerveza mal tirada y en la puja que incluía al Chelsea y Liverpool se añade el Arsenal, que, como espera hacer caja con Cesc, aseguran que soltaría 23 millones de euros.
Un traspaso precisa cuatro circunstancias. Que uno quiera comprar, que el otro acepte vender, que el primero disponga de suficientes euros para afrontar la operación (del quiero al puedo hay un buen trecho) y que el protagonista, el jugador, admita el negocio de los otros dos.
¿Convergen todas las circunstancias? De momento el Valencia niega haber recibido oferta alguna y además Manuel Llorente niega que quiera vender. Pero eso vamos a ponerlo en cuarentena, porque el club está sobrado de Pinochos y él, precisamente, habla demasiadas veces con la boca pequeña. Además, en el contrato de Mata aparece una cláusula por la que a partir de determinada oferta (en torno a los 25 millones) el futbolista puede exigir la salida o una mejora salarial.
Se me ocurren varias preguntas del millón. ¿Se hará realidad la oferta del Arsenal (o el club que sea)? En ese caso, ¿Llorente y Braulio se pueden permitir la salida de Mata, siendo que terminan de errar en el fichaje de Gameiro y han traspasado a Joaquín? ¿La economía posibilita un desembolso para evitar la marcha? ¿En qué cajón guarda el club la venta de ilusión? Y a todo esto, ¿qué dice Mata? Él tiene la última palabra. Mientras haya un contrato, es así. Lo otro se llama especular.

265. (Publicado en Las Provincias, el 29 de junio de 2011)




¡Trata de arrancarlo, Alfredo!

Publicado en Valencia Fruits (nº 2.497, 28-6-2011)

Héctor Núñez

27/6/11

Unai está de los nervios

Oficialmente está de vacaciones, pero Unai no descansa. El entrenador del Valencia va de aquí para allá, que cantaba Julio Iglesias, aunque sin mirar hacia atrás, porque lo que le preocupa es el futuro. Va de Fuenterrabía a Almería, con repetidas paradas en las nuevas oficinas del club, frente al monumento a la afición.
Enganchado a su nuevo iPhone, el hombre está de los nervios. Rezuma inquietud porque se acerca el día de San Fermín, para el Valencia sonará el chupinazo de la pretemporada y en la confección de la plantilla quedan muchos ventanales por cerrar y demasiadas puertas por abrir.
A la dirección deportiva se le puede pasar el arroz. Siempre se ha dicho que antes de entrar conviene ofrecer la salida, pero el asunto de las bajas de futbolistas que no cuentan permanece encallado. Los Miguel, David Navarro, Banega, Fernandes, Chori, Sunny, Feghouli, Del Horno, Nacho, Renan. continúan estáticos en esa pole.
El capítulo de incorporaciones también necesita aire fresco. De momento todo está igual que hace unas semanas, cuando Dani Parejo engrosó la nómina tras los fichajes de Diego Alves y Rami.
Pero falta mucho más. Unai espera un lateral, un central, un organizador, un jugador de banda (a ser posible que se desenvuelva en ambas, para cubrir las ausencias de Joaquín y Vicente). Pretende, al menos, tres futbolistas más, y por eso es normal que cada dos horas se ponga en contacto con Braulio para conocer las novedades y, de paso, meterle presión.
La Liga debe de empezar el 20 de agosto, aunque hasta fin de mes hay tiempo de cerrar un objetivo u otro. Ahora mismo, con el peso de las deudas de los clubes en el horizonte, el mercado de futbolistas es un hervidero. Los clubes se afanan y buscan lo mejor, lo más bonito y lo más barato, pero a la vez saben que hay que disimular el interés para no encarecer el producto. Tanto si se trata de comprar como de vender. Y en esas está el Valencia. Y claro, Unai, 'atacao'.

264. (Publicado en Las Provincias el 27 de junio de 2011)





26/6/11

Al otro lado del río Pecos

El fútbol es como las películas. Un gran negocio con artistas de postín, con lustre de Champions y mucho espectáculo. Pero rascas un poquito y no deja de ser una farsa, porque bufonada es que los clubes españoles adeuden cerca de 3.500 millones de euros; algunos, además, se parapetan en la ley concursal, que es una trampa para no descender de categoría, y mientras los organismos competentes (digo competentes porque el asunto les compete) permanecen con la ventana de la ineficacia de par en par.
La situación no es de broma. Más que a los comentarios de barra de bar y al cabreo, invita a solicitar que si hay alguien que manda que lo quiten (porque lleva años sin dar con la solución), y si no lo hay que lo pongan (a ver si la acierta, si la encuentra). Porque esto afecta a todos, ¿eh? No sólo es cuestión de la LFP y la AFE, que son los que desde hace tiempo deberían haber movido ficha. Eso sí, la patronal ha dicho que hay que controlar el gasto de los equipos con nuevas normas, y el sindicato de futbolistas amenaza con una huelga.
En una sociedad que ve cómo cada día echan la persiana numerosas empresas y que se superan los 4.5 millones de desempleados (no digo casi cinco para que nadie me eche en cara que soy derrotista), no es de recibo el todo vale para los clubes de fútbol. Las obligaciones son distintas a las del resto de españolitos. El fútbol, como las películas, está al otro lado del Pecos, donde impera otra ley, o ninguna.
Hace unos días apareció un informe económico de un especialista en finanzas que lleva años denunciando esta situación y la pasividad de los organismos deportivos, pero de momento mucho bla bla y que si quieres arroz, Catalina.
Creo que aquí ha llegado el momento de pedir que los políticos se mojen de verdad, sin miedo a perder el voto si uno, tres o quince equipos desaparecen por sus impagos a la Seguridad Social, a la Agencia Tributaria, a jugadores, a otros clubes... Vamos, que se les exija como a cualquier hijo de vecino.

263. (Publicado en Las Provincias, el 24 de junio de 2011)




22/6/11

Posados y pesados estivales

Los últimos días han sido muy intensos. El calor ya aprieta, hay más tiempo para la cháchara y debatimos sobre la morosidad, que registra su mayor subida desde 2009, y en torno a los posados que cada año se convierten en invitados estivales. La tradición manda. Y los euros del papel couché, también.
Pero pasamos del habitual 'metebarriga-sacapecho' de la Obregón y de la imagen de Guti y la tal señorita López, ex concursante de Super Modelo, con la que va a inaugurar la barraquita de tres millones de euros que se ha mercado a orillas del mar ibicenco. Tampoco nos detenemos en la foto de Merkel y Sarkozy lanzando un salvavidas a los griegos ni en el flash de unos potentados a los que otros esperan que la justicia atrape con el botín y que del banco pasen al banquillo. Nosotros vamos a lo de aquí, a los valencianistas que desplazan el protagonismo de los habituales Cristiano y Piqué.
La máxima atención en este momento la centraliza Adil Rami, que como único atavío para cubrir parte de su físico ha utilizado un balón de fútbol. Hasta ahí, nada nuevo porque sin ir más lejos, Albelda también lo hizo no hace demasiado. Pero las imágenes del flamante defensa francés aparecen en la revista 'Attitude' y han causado un tremendo impacto más allá de los Pirineos. La publicación gala 'Tetu' le invistió como el futbolista más sexy de 2009 y en Francia le han convertido en icono gay.
Rami da para ir tirando de papel couché. Pero ahora mismo lo que debería de mantener la atención del valencianismo es otro posado: el del sorprendido Joaquín, cuando accedía a un conocido restaurante de Puerto Banús, donde compartió mesa con la cúpula de la dirección deportiva del Málaga.
Más que posado, va a ser algo pesado de digerir. Porque si al final Joaquín se va y el Valencia saca los cuartos que pretende, pues aquí paz y allá gloria. Pero si no hay acuerdo y termina por quedarse, veremos qué cara ponen en la foto unos y otros.

262. (Publicado en Las Provincias, 22 de junio de 2011)




21/6/11

¿Será indignación o hastío?

Publicado en Valencia Fruits, nº 2.496 (21 de junio de 2011)

Melodía de verano

No sé qué fue antes, si las milongas futbolísticas de estas fechas o las canciones del verano. A medida que se acerca el mes de julio, en el mundo del balón se acentúan las cantinelas, del mismo modo que las discográficas ponen en el escaparate las melodías machaconas que nos trae el George Dann de turno. Hace años fue 'Cuando calienta el sol', luego 'El limón del limonero', 'El bimbó', 'El negro no puede', 'Mueve tu cu cu'...
Cada año lo mismo, como en el mundo del fútbol. Esta vez toca Cesc y el Kun, pero el Valencia no se escapa. Llevamos varias semanas escuchando que el futuro de Joaquín y el de Isco está lejos de Mestalla. Tan lejos como se pretende o se ha pretendido que estuviera el de Navarro, Fernandes, Chori, Éver, Miguel. y el de algunos jugadores más, porque la nómina blanquinegra, contando los futbolistas cedidos que deben de regresar el 7 de julio, sigue siendo demasiado extensa.
Todos los veranos igual. Cambian los colores, los nombres, pero el objetivo es idéntico. Y sólo es el principio. No 'Me lo dijo Pérez', ni falta que hace, para saber que el Valencia está obligado a mover ficha con el fin de aligerar el equipaje, pero sin mirar siquiera los activos que todos sabemos.
Ahora mismo Braulio necesita 'Un rayo de sol' que le ilumine en ese trabajo, porque el marroncito que tiene por delante es de padre y muy señor mío. Para que la bola de nieve no se haga cada vez más grande, resulta imprescindible poner en práctica eso de antes de entrar dejen salir. El responsable de la secretaría técnica lo debe tener presente, pero a la vez necesitará que Manolo Llorente se estire para realizar un fichaje que suponga un verdadero plus de calidad para el equipo.
'El veranito' seguirá con la misma melodía machacona, pero este año, ¡y esa es otra!, con el añadido de un coro de talibanes, aventando las ascuas de las hostilidades que un tal Rosell y otro que tal baila, Florentino, se han dedicado a reavivar. 'La boooomba'. ¡Dan ganas de irse de vacaciones!

261. (Publicado en Las Provincias, 20 de junio de 2011)




Eloy Olaya

17/6/11

Esto no es lo que era

La lozanía económica del Barça y el Madrid cada día contrasta más con las carencias que muestran otros equipos, como el Valencia, Villarreal, Sevilla, Atlético y otros muchos que viven en el alambre de las privaciones para tratar de equilibrar sus finanzas. Siempre ha habido ricos y pobres, pero no tanto, porque la competición cada vez arranca más falseada que el escote de Yola Berrocal.
El fútbol, como espejo de la sociedad, se sustenta en la desigualdad permanente. Entre los dos grandes y el resto se observa el mismo contraste que ofrecen las espectaculares cuentas de resultados que presentan algunos emporios financieros y las de pequeños empresarios (nótese que obvio pronunciarme sobre la insolvencia familiar) que, después de flexibilizar con lágrimas sus diminutas plantillas y aumentar la tasa del desempleo, acababan por bajar la guardia y no les queda más remedio que bajar también la persiana.
El mundo del fútbol ha cambiado. La desproporción aumenta de forma vertiginosa. Hace un tiempo, los equipos condimentaban las pretemporadas al fuego lento de la confianza, con una pizca de ilusión y otra de arrojo, que tiene nombre de planta herbácea. Luego el ejercicio solía acabar con ventaja de los mismos. Pero no siempre ni de manera tan desmesurada como viene ocurriendo estos años.
La abismal distancia de puntos que en las dos últimas temporadas han establecido el Barcelona y el Real Madrid sobre el tercer clasificado (el Valencia acabó con 71, cifra que en otro tiempo daba para luchar por el título) refleja que el fútbol cambió. Esto no es lo que era y soñar con títulos es vender humo.
La burbuja se hace grande y la capacidad de endeudamiento de los trasatlánticos no sólo se sustenta en el apoyo de la banca que cierra el grifo a otros sectores. También se debe al silencio del resto de clubes que, animalitos de Dios, se conforman con unas migajas. Esos que ahora están a la espera de que los grandes muevan ficha para ver qué pueden hacer.

260. (Publicado en Las Provincias, el 17 de junio de 2011)




15/6/11

Hablar un mismo idioma

El diálogo es necesario. Imprescindible en la convivencia. La sabiduría popular dice que hablando se entiende la gente, aunque en ocasiones es imposible porque el de enfrente hace oídos sordos o en otras, como la tecnología nos supera, no es difícil llevarse algún chasco cuando el interlocutor es una máquina, ya que puede suceder lo que a ese del anuncio de la tele, que pide ayuda porque su coche echa humo y el volante se bloquea, y la respuesta es que le envían un tuno que le canta 'Clavelitos' o lo que sea.
Aparte las ya conocidas incorporaciones de Alves y Rami, este último presentado ayer con toda pompa, en el asunto de los refuerzos en el Valencia ha habido momentos de oídos sordos o en los que ha ocurrido como en el anuncio. Mi amigo el valencianista dice que se habla distinto idioma y se apresta a recordar que toda la temporada se ha estado reclamando que el equipo precisa fortalecer el sistema defensivo y encontrar un hombre de creación y el punto de mira se fijó en el ataque. En un mediapunta, Parejo, y en un delantero que no ha querido venir.
Esto es para hacérselo ver y sobre todo para recordar la historia reciente, por el dicho ese de que si las cosas salen bien no hay por qué cambiarlas necesariamente. Desde hace años la fortaleza del sistema defensivo ha sido el sustento de un equipo sin problemas para hacer goles. Las virtudes ofensivas del Piojo, Ilie, Sánchez, Mendieta, Carew, Baraja, Villa. se complementaron con la fortaleza de la zaga.
Dado que este equipo suele formar con un delantero y un mediapunta, mi amigo insiste en que en ataque hay calidad y cantidad. Otra cosa es que se vaya Joaquín. Entonces, sí. Pero de momento, aparte de centrar la atención y los euros en un organizador de solvencia, es imprescindible construir el equipo desde atrás.
Y en lugar de fichar, ¿no será que lo que realmente necesita el grupo es trabajar más el sistema de contención, para que nadie ironice con eso de que cuando le acosan «el Valencia no para ni un taxi»?

259. (Publicado en Las Provincias, 15 de junio de 2011)




Déficits ocultos de las comunidades

Publicado en Valencia Fruits, nº 2.495 (14 de junio de 2011)

14/6/11

¡Señor, qué cruz!

Vivimos en un ambiente de crispación. Indignados por todas partes. Unos con mucha razón y otros probablemente con menos motivos. Pero los hay a porrillo, allá por donde mires. A derecha e izquierda el horizonte está tan repleto de irritados que nos hemos acostumbrado a respirar en el enfado permanente. Ya parece algo como de la familia.
Los indignados que acuñaron el epíteto el 15M parece que se van con la música a otra parte, pero sin variar de partitura y con la confianza de que su recital se convierta en el principio de una sinfonía por el cambio. En Les Corts, el nivel irritación también debe haber descendido algo, o no, después del profundo cabreo que en más de uno provocó el crucifijo de madera que Juan Cotino colocó en la Mesa de la Cámara durante la sesión de constitución.
¿Y en el Valencia, qué pasa? Pues que el club también navega en un mar de la indignación. ¡Otra cruz! Pero, ojo, nada que ver con el tema religioso de las publicidades para llenar Mestalla, que después de captar la máxima atención durante varios días (¿me siguen?) se ha arreglado el asunto con un anuncio más light.
En este caso, la cruz es la que van tener que van a tener que llevar a cuestas, al alimón, Manuel Llorente y Braulio Vázquez, por culpa de las calabazas que les ha dado el francés Kevin Gameiro.
El delantero les ha marcado un gol por la escuadra. Ha dejado al club compuesto y sin novio, y a los aficionados con un disgusto de tres pares de narices. Importa poco que el motivo del rechazo del galo radique en su informalidad, en las pretensiones de su agente, en las del tal Fery, presidente del Lorient, en la intervención del seleccionador Laurent Blanc o en los euros del Paris Saint-Germain. Eso es lo de menos. Lo de más ahora mismo es tratar de volver a ilusionar a los aficionados a los que se les pide fe y que pasen por caja y saquen el abono. ¡Qué cruz, Señor!

258. (Publicado en Las Provincias, el 13 de junio de 2011)




10/6/11

Acertar es el verbo

Cada día que pasa sale un nombre nuevo y es normal, porque estamos en esas fechas en las que los equipos se mueven en busca de cerrar sus plantillas y de desprenderse de lo que les sobra. Miran aquí, escarban allá, y además los agentes ponen en los escaparates a sus representados y les dan lustre.
Con todo lo que queda, si fraguaran todos los fichajes que se le atribuyen al club de Mestalla, Unai estaría en disposición de formar tres o cuatro equipos de garantías, mientras que a Llorente le veríamos tirándose de los pelos (es un decir) ante tanto despilfarro; que una cosa es fortalecer la plantilla y otra echar la casa por la ventana.
Todos los nombres que suenan como refuerzos ilusionan al personal y seguro que llega más de uno. Para eso el club ha lanzado esa campaña que habla de fe y de fuerza. Sería absurdo airear la venta de abonos sin ofrecer a cambio una buena compensación.
Al mismo tiempo que mira hacia el futuro, el Valencia (no es el único equipo al que le sucede) lleva a cuestas un lastre de jugadores que llegaron con la aureola de imprescindibles y luego acabaron siendo carne de cesión, la mayor parte de las veces, en el más amplio sentido de la palabra; es decir, cesión total, porque el importe de la ficha lo costeó el club.
Ese ha sido y es el caballo de batalla con el que cada año han de bregar los responsables deportivos que han desfilado por Mestalla. Ahora Braulio, antes Fernando y con anterioridad Sánchez, Carboni, Macià (pasemos por alto a Ruiz), Subirats, García Pitarch.
La cuestión es acertar. Ese es el verbo. Sacar a los que no suman y atinar con los que llegan. En unos casos habrá que rascarse el bolsillo, como ocurrió con Villa o Soldado y en otros, para dar con jugadores del nivel de Silva o Mata, usar la imaginación sin temor a arriesgar. No debe repetirse lo de hace tres años, cuando el club renunció a desembolsar medio millón de euros por el chileno Alexis Sánchez, que mira por donde ahora es una perla en el futbol europeo

257. (Publicado en Las Povincias, 10 de junio de 2011)





8/6/11

Ceda el paso

La situación deportiva del Valencia puede cambiar en unas horas, incluso en cuestión de minutos. El club trabaja en numerosos frentes para la confección de la plantilla de cara al próximo ejercicio, y aunque de momento sólo ha rubricado los fichajes de Rami y Alves (Parejo está al caer, y dicen que Gameiro, a la vuelta de la esquina), seguramente tendrá que ampliar el cupo de incorporaciones si se confirman todas las salidas en las que se especula, que no son pocas.
Cuando arranque la pretemporada el próximo 7 de julio, es de suponer que se habrá despejado el horizonte, porque ahora mismo Unai tiene un numeroso grupo de futbolistas y muchos de ellos, demasiados, no entran en sus planes.
Pero tampoco hay que asustarse, porque eso es lo que ocurre todos los años por estas fechas, aunque en esta oportunidad queda agravado no sólo por los que, con contrato en vigor, no cuentan (Moyà, Fernandes, Sunny, Feghouli, Renan, Nacho, Del Horno, Isco -el entrenador dijo que lo mejor era una cesión- Aarón, Montoro.), sino también por un grupo del que desde hace un tiempo se viene hablando de darle salida (Miguel, Navarro, Ever y en menor medida Chori ) aparte de que en las últimas horas se han incorporado a esa hipotética lista dos jugadores más: Joaquín y Bruno (dicen que el Málaga pretende al extremo y que el defensa tiene una oferta del Lazio).
El que la lleva la entiende y es de suponer que las directrices del ojo que todo lo ve y desde lo alto maneja los hilos del Valencia, determina que las necesidades obligan a la secretaria técnica a ese proceder. Sin embargo a nadie se le escapa que en época de austeridad no se debería de sacar el talonario con tanta presteza, aparte de que también sería conveniente echar mano de la cortesía, del "ceda el paso", de tener presente aquel viejo cartelito que aparecía en el quicio de muchas puertas. El de «antes de entrar dejen salir». Más que nada por si llegado el momento de desalojar, las salidas están obstruidas.


256. (Publicado en Las Provincias, 8 de junio de 2011)



7/6/11

Antonio Fuertes

Sementera tudesca

(Publicado en Valencia Fruits, nº 2.494, día 7 de junio de 2011)

El algodón no engaña

Si miras de soslayo, todo va sobre ruedas. El Valencia camina adelante y asciende firme por cuestas y desniveles, a caballo de un llamado plan de austeridad económica, con presupuesto equilibrado, pero al mismo tiempo con elevados objetivos deportivos.
Realmente lo que el Valencia ha conseguido en el terreno de juego es lo que hasta ahora ha dado vida al club y a sus aficionados, porque lo estrictamente financiero, si profundizas un poquito y rascas, no creas que te sale premio. A la prueba del algodón me remito.
El Valencia despidió el curso dando en lo deportivo una alegría a sus aficionados (la clasificación directa para la Champions) y en los últimos días los ha vuelto a motivar. Aparte de rebajar los precios de los abonos y de provocar que se hable de la sociedad mediante anuncios (que han generado división de opiniones), ha ilusionado al personal, aunque a base de talonario, con el fichaje de Rami (6 millones) y el pretendido de Parejo (del orden de los 4/5, más la cesión de Moyà), pasando por el de Diego Alves (3 millones) y mirando de muy cerca a Gameiro (¿10 millones?). ¿Se acabaron los jugadores a coste cero? Si definitivamente se cumplen las previsiones, se habrán invertido alrededor de 25 millones en un refuerzo para cada línea: portería, defensa, media y delantera.
Cumplido su segundo año presidencial, Manuel Llorente ha destacado como logros la citada clasificación para la Champions y la reducción de la deuda. El objetivo continental adquirió un mérito añadido por haberse conseguido a pesar de un descenso del coste de la plantilla. En cuanto a la reducción del pasivo de la sociedad, no convendría obviar que los 92 millones de la ampliación de capital y los traspasos de Villa y Silva tuvieron bastante que ver. El algodón, no engaña.

255. (Publicado en Las Provincias, el día 6 de junio de 2011)



3/6/11

Las virtudes del Valencia

El Valencia ha apostado por la teología. En la campaña de imagen y abonos para la próxima temporada que ayer presentó el club, ha echado mano de las virtudes teologales.
La fe adquiere un papel primordial en el spot publicitario; la ensalza y hace propia, como mejor arma para luchar contra las adversidades y combatir a los dos grandes gigantes de la Liga española. La esperanza también aparece en la promoción, en este caso como un firme deseo, y a la vez necesidad, de mejorar la asistencia en las gradas de Mestalla. Y en cuanto a la caridad. aparece en la rebaja de los precios de los abonos.
Probablemente el mensaje que lanza el Valencia en general calará hondo entre los aficionados y el club conseguirá el efecto deseado: un mayor apoyo, que al fin y cabo es lo que pretende la campaña promocional. Y como además tenemos la fortuna de vivir en un país sin limitaciones talibanes, las críticas no irán más allá de un comentario sobre el buen o el mal gusto.
Sin embargo, una cosa es el acierto estético y otra el comportamiento ético. No voy a ser yo quien se rasgue las vestiduras o encabece una cruzada contra la gratuidad de comparar el cáliz sagrado con la 'orejona', pero seguro que algunos no tardan en preguntarse si era necesario recurrir a un argumento de carácter religioso, que siempre puede herir sensibilidades.
Aunque el publicista sabe que deben respetarse las tradiciones morales de la sociedad a la que va dirigido el anuncio, si el spot provoca controversias significa que ha dado en la diana. «Que se hable, aunque se mal, pero que se hable», se dice al referirse a los temas de propaganda. En época de crisis financiera, el Valencia se apoya en las virtudes teologales para llenar el campo. Quizá para promocionarlo podía haber pensado también en una de las cardinales: la prudencia.

254. (Publicado en Las Provincias, el 3 de junio de 2011)




Lo que se avecina!

Valencia Fruits, nº 2.493 (31 e mayo de 2011)

Dicho popular


Publicado en Valencia Fruits, nº 2.492 (24 de mayo de 2011)

Las cifras del CIS

Publicado en Valencia Fruits, nº 2.491 (17 de mayo de 2011)

Las municipales y autonómicas


Publicado en Valencia Fruits, nº 2.490 (10 de mayo de 2011)

El futuro imperfecto


Publicado en Valencia Fruits, nº 2.489 (3-5-2011)

1/6/11

El tiempo lo dirá

Un viejo aforismo afirma que el tiempo es un juez inapelable y por eso habrá que esperar al inicio de la Liga para ver si se cumple el propósito que ayer desveló Llorente respecto a la cantera. El presidente aseguró que cuatro jugadores del filial harán la pretemporada con el primer equipo y que dos de ellos seguirán a las órdenes de Unai.
Pero enseguida, después de determinar si existe suficiente calidad, que se supone, se hizo necesario analizar la situación con serenidad, porque la incorporación de dos canteranos va a resultar complicada en una plantilla de treinta y tantos futbolistas. No hay que olvidarse de los fichajes, de los «desfichajes» que no se podrán llevar a cabo, y de los que regresarán tras haber jugado cedidos. Habrá que volver a buscar acomodo a un elevado número de futbolistas (en algún caso haciendo frente a buena parte del contrato) para que los chavales tengan plaza.
Un poco después de que Llorente anticipara lo de los dos canteranos que seguirán en la primera plantilla, Isco adquirió protagonismo, pero Emery echó por tierra todas las especulaciones. El técnico considera que lo mejor para el chaval es que continúe su formación como cedido, siguiendo el método que se empleó con los Silva, Albiol, Pablo, Alba o Guaita.
Descartado Isco, la incógnita radica en saber qué dos serán los elegidos y por qué con ellos se aplica un criterio distinto. Huele a venta de humo, pero habrá que esperar un par de meses. El tiempo lo dirá.

253. (Publicado en Las Provincias, 1 de junio de 2011)



Antonio Martínez, "Antón"