7/12/12

LA HORA DE LA VERDAD

Ernesto Valverde ya se ha remangado la camisa, se ha puesto manos a la obra para sacar al equipo del pozo, y Mauricio Pellegrino ha pasado a ser parte de historia del Valencia como entrenador, aunque todavía no ha cobrado el finiquito. A rey muerto, rey puesto. En el mundo del fútbol no hay apenas tiempo para llevar lutos, más todavía cuando el enfermo es crónico, a pesar de que ahora alguien pueda sacar pecho recordando las cifras que el equipo está consiguiendo en la competición continental, pero olvidándose de las del torneo doméstico, que es el que hasta ahora ha proporcionado el pasaporte para viajar a Europa.

El nuevo entrenador, que llega avalado por un amplio y buen currículo, ha dicho que quiere sacar el máximo rendimiento a los jugadores. Se trata de una máxima con la que seguro que coincidiría su antecesor o cualquiera que afrontara el reto de llevar a este Valencia a luchar por los puestos de Champions League, que sigue siendo el objetivo prioritario. Algo que va a ser difícil de alcanzar. La máxima y la meta.

En otra circunstancia la tarea de exprimir a los futbolistas entrañaría una mayor complicación que ahora. Valverde tiene a su favor que si hay alguien que deja de remar, se le van a ver las vergüenzas con más claridad y Mestalla no lo va a permitir. En este momento ya no hace falta rascar un poquito para encontrar la realidad del grupo que se puso en manos de Pellegrino. Ha quedado a la vista de todos. Y ha llegado el momento de ver quién es quién en esa torre de Babel llamado vestuario. El momento de comprobar qué jugadores están de paso y quienes están implicados y van ser los que tiren del carro.

Si a cualquier político se le ofrecen los tradicionales cien días de confianza, y se le dieron a Pellegrino, aunque ahora el margen no puede ser el mismo porque la Liga se va consumiendo, por el bien del Valencia Valverde necesita el máximo apoyo. Bastante más confianza de la que tiene en él quien le ha fichado por seis meses.
 
480 (Publicado en Las Provincias, el 7 de diciembre de 2012)

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