30/6/09

El verbo correcto

Mientras seguimos esperando una explicación transparente de lo que va a hacer la banca con la inyección de los tropecientos millones de euros del préstamo que le ha concedido el Gobierno (unos dicen que es para que pueda ofrecer la financiación oportuna a las empresas y ¿a los contribuyentes?), leo que un alto ejecutivo de las finanzas británicas ha sentenciado que la banca debería pedir disculpas a sus clientes...
¡Uf, que miedo! ¡Siempre igual! Es el hábito. Ni tienen la sensibilidad ni desde luego la habilidad de cambiar de verbo. ¡Con lo sencillo que para ese caso resultaba reemplazar el pedir por el ofrecer! Por favor, descansen. No pidan ni la hora, que ya nos han sacado bastante en los últimos años. Y lo que nos queda, ¿no?

29/6/09

¡Que Dios nos pille confesados!

(Valencia Fruits, nº 2.406, 30-6-2009)

23/6/09

Errores de estrategia

El Valencia busca desesperadamente ayuda oficial para reactivar las obras del estadio de la avenida de las Cortes, paralizadas desde principio de año. Manolo Llorente, que es gato viejo en estas lides, ha ido haciendo sonar su reclamo. La semana aprovechó la visita protocolaria que, al frente del consejo, realizó al Palacio de la Generalitat para presentarse ante Paco Camps.
Sin embargo entonces cometió un error de estrategia, de principiante. En un aparte final con el presidente (mientras el resto de dirigentes, salvo Javier Gómez, quedaban al margen), Manolo se olvidó de que uno de ellos. De Fernando Gómez, es un íntimo de Camps, con quien en ocasiones comparte partidas de pádel.
La anécota, que de momento no debe de pasar de ahí, conduce a una pregunta que empieza a inquietar. ¿Son buenas las relaciones entre Manuel Llorente y Fernando Gómez? Pues mire usted, qué quiere que le diga... Por ejemplo habría que conocer la opinión de quien ostenta la responsabilidad deportiva respecto a la idoneidad del desembolso de cinco millones de euros en el fichaje del portero Moyà, o sobre las reuniones con los representantes de Silva, Villa y Albiol en las que el ex futbolista ha permanecido al margen...

¡Lo que se avecina!

(Valencia Fruits, nº 2.405, 23-6-2009)

22/6/09

Camps, Llorente y Villa

Me cuenta un pajarito que anida en la torre más alta del Palacio de la Generalitat, que el pasado viernes el presidente del Valencia se entrevistó con Paco Camps pocas horas antes de comparecer ante los medios de comunicación para asegurar que el club de Mestalla frenaba el cacareado traspaso de David Villa.
Mi ave confidente añade que Manolo Llorente acudió a la cita acompañado de su vicepresidente, Javier Gómez, pero desconoce si ambos visitantes lucieron terno oscuro oficialista o si vestían americanas de sport.

19/6/09

Florentino y las sutilezas

Quienes le conocen bien dicen que Florentino Pérez es un lince para los negocios. Ayer demostró que, además, es de verbo sutil. Aunque el presidente del Real Madrid está convencido de que David Villa jugará la próxima temporada en su equipo, no lo aireó a las bravas. Echó mano de la diplomacia. "Es cuestión de tiempo..."
Conociendo las necesidades económicas del club de Mestalla, evidentemente es cuestión de tiempo. La frase de don Flo no puede ser más adecuada porque conduce directamente al viejo adagio británico The time is gold. Aunque otros utilizan más el time is money, todos sabemos lo que quieren decir en román paladino.
Villa es del Valencia y tiene contrato hasta 2013, con una cláusula de rescisión que supera los 125 millones de euros (Javier Gómez, si me equivoco, corrígeme por favor) y la obligación de quienes mandan en el club blanquinegro es velar por los intereses de la sociedad. Punto y aparte, por no decir final, que quiero añadir una cosita.
Es muy lícito que el Real Madrid esté interesado en el futbolista y también que el Guaje pretenda cambiar de aires. Pero por delante esas consideraciones deben prevalecer los intereses del Valencia. Ni los del Bernabéu ni los del futbolista. Y si mucho me apuran, al goleador se le puede recomendar que eche mano de la hemeroteca... En marzo de 2006, cuando festejaba la ampliación de su compromiso, lanzó esta perla: “Los contratos están para cumplirlos”.

18/6/09

Coger el toro por los cuernos

(Valencia Fruits, nº 2.404, 16-6-2009)

12/6/09

¡Joder, que suerte tengo!

Hay quienes aseguran que la nostalgia es un reflejo de la melancolía. Es posible. Otros, en cambio, consideran que entraña una enorme dosis de ejercicio histórico. También es probable que tengan razón. Yo ayer viví un revoltijo de ambas cosas, aunque por encima de todo sentí enorme orgullo y satisfacción (¡Ojo, que no vale imitar la voz del Rey para expresar esos dos sentimientos!).
Cuando un periodista ya ha cubierto con creces tres décadas de su profesión y se encuentra inmerso en un ERE que ha planteado el diario donde trabaja, verse arropado en una cena espontánea por más de sesenta compañeros de distintos medios de comunicación, supone algo que yo no sé describir.
Amigos, periodistas noveles y menos jóvenes con los que he convivido durante años, se dejaron en casa la competencia que manteníamos con el micrófono o con la pluma, y estuvieron ahí, a mi lado, en una reunión de colegas en la que hablamos de todo y recordamos momentos entrañables.
Ni soy un nostálgico que corre detrás del viento ni añoro el pasado, porque no hay pena en la remembranza. Pero desde luego nunca voy a olvidar este once de junio y que tengo muchos amigos. ¡Muchos! ¡Joder, que suerte que tengo!
Gracias y hasta pronto. Ya me conocéis. Soy de espíritu inquieto y estoy decidido a seguir dando guerra...

10/6/09

Argumento

(Valencia Fruits, nº 2.403, 9-6-2009)

8/6/09

Cosas mías

De cara a la próxima temporada de Liga, los aficionados de determinados equipos de fútbol dispondrán de unos días para renovar sus abonos... y de treinta y ocho jornadas para rememorar sus sufrimientos.

5/6/09

¡No los dejéis solos!

Acordaos de que la cita europea es el domingo, ¿eh? ¡Acudid! ¡No los dejéis solos! ¡Va, que no os cuesta nada! Si es un momentín... Prometo que si vuelvo pronto del Perellonet, donde voy a pasar el fin de semana, os lo volveré a recordar.

4/6/09

El adiós de Soriano

Ha sido una dimisión anunciada y esperada. Vicente Soriano deja el Valencia. El presidente no ha podido vender las parcelas del viejo Mestalla, como pretendía. Era una batalla personal y se va cabizbajo, derrotado.
De haber consumado ese objetivo, el club habría recibido una importante inyección económica aunque, paradójicamente, probablemente él habría cometido una infracción porque en el reglamento de régimen interno del consejo se hace especial hincapié en la importancia de prevenir gestiones que pudieran comprometer la independencia del gestor, aunque sus compañeros de viaje le habían dado vía libre. Pero en una venta de tal envergadura...
En el comunicado que Soriano leyó antes de presentar la dimisión, dejó claro que abandona el Valencia muy dolido. Lo delata la coletilla final de su carta de despedida. Tras afirmar que logró que los mejores jugadores se quedaran, añade: "ahora mis sucesores quieren venderlos". Una frase que huele a severa andanada.

3/6/09

Son unos ilusos

(Valencia Fruits, nº 2.402, 2-6-2009)

2/6/09

ONO y atención al cliente

La culpa es mía. Por cómodo o por tonto. Podría darme de baja y punto. Pero... sigo pagando las cuotas, aunque a veces me incluyan un concepto que no está nada claro.
Lo que hace ONO no tiene nombre. ¿El Fandi? Se queda más que corto. Los capotazos que te dan cada vez que marcas el 902 y pico ese de atención al cliente, no tienen parangón. Son de olés contínuos.
¿Atención es interesarse por algo, estar pendiente, ocuparse, escuchar...?
Pues lo que tienen en ONO es un morro que se lo pisan. Y la habilidad de, tras advertirte de que la conversación se graba por tu seguridad (?), mantenerte pegado al teléfono como un gilipollas, hablándole a una máquina cuantos más minutos mejor (porque no sé si sabrás que la llamada la pagas tú) para, al final, como estás harto de marcar el uno si quieres tal cosa, el dos si lo que pretendes es tal otra, el tres si es para... y no te solucionan nada, terminar colgando.
A pesar de todo esto, tras analizarlo detenedindamente, he llegado a la conclusión de que en ONO no son tan listos como parece. Si entre todas las alternativas que te ofrece la máquina parlante te proporcionara un número para llamadas de cabreados y poder mandar a la mierda a su director general y al resto del consejo de administración, seguro que acabarían ampliando la recaudación. Yo llamaría más de una vez. ¡Ya lo creo que llamaría! A modo de terapia.