16/8/08

Escribir de filosofía no es tan complicado como dicen

Sí. Me he dado cuenta de que escribir de filosofía no es tan complicado como dicen. Evidentemente hay que tener una noción del asunto que vas a tratar. Pero no demasiado, ¿eh? Tampoco hay que echarse a temblar. Imaginación y poco más. Supongamos, por ejemplo, que siguiendo la doctrina de Descartes, pretendemos referirnos al teorema de Euler sobre los poliedros, o si nos vamos más allá, al discurso del método para dirigir bien la razón. Pues bueno, con lo dicho es más que suficiente. No hace falta adentrarse en meditaciones metafísicas ni llegar a la psicología existencial de Sartre, al racionalismo de Spinoza o a la filosofía del absurdo de Camus. Desde ese momento, como la gente no va a prestar atención a tus tonterías, se hace punto y aparte y se pasa la acción. Inicialmente se pulsan a la vez las teclas shift y la flecha que señala hacia izquierda, y en el instante en el que todo el texto se ha puesto en negativo (lo que los técnicos denominan como "definido") hasta llegar a la primera palabra escrita, del mismo modo hicimos antes al alimón pulsaremos ahora otras dos teclas: control y la letra c. Et...voila!, que diría el padre de la filosofía moderna. Llega el momento de estirar el asunto todo lo que nos haga falta y convenga. Después de hacer este otro punto y aparte, basta con tocar simultáneamente las teclas control y la letra v. Y como si fuera cosa de un prestidigitador, podréis observar que pulsando ambas teclas el texto se multiplica tantas veces como se desee, con lo que la extensión del escrito queda siempre al libre albedrío del artista porque esto, aunque no lo parezca, es un arte. ¿Que se trata de una copia de las frases anteriores? Ya, claro. Eso es evidente. Pero no pasa nada. Lo garantizo. Nadie llega a leer hasta ahí. Es más, confieso que con este método yo aprobé una asignatura troncal, lo que viene a demostrar que ni siquiera el catedrático alcanzó a pasar más allá del primer folio. Sí. Me he dado cuenta de que escribir de filosofía no es tan complicado como dicen. Evidentemente hay que tener una noción del asunto que vas a tratar. Pero no demasiado, ¿eh? Tampoco hay que echarse a temblar. Imaginación y poco más. Supongamos, por ejemplo, que siguiendo la doctrina de Descartes, pretendemos referirnos al teorema de Euler sobre los poliedros, o si nos vamos más allá, al discurso del método para dirigir bien la razón. Pues bueno, con lo dicho es más que suficiente. No hace falta adentrarse en meditaciones metafísicas ni llegar a la psicología existencial de Sartre, al racionalismo de Spinoza o a la filosofía del absurdo de Camus. Desde ese momento, como la gente no va a prestar atención a tus tonterías, se hace punto y aparte y se pasa la acción. Inicialmente se pulsan a la vez las teclas shift y la flecha que señala hacia izquierda, y en el instante en el que todo el texto se ha puesto en negativo (lo que los técnicos denominan como "definido") hasta llegar a la primera palabra escrita, del mismo modo hicimos antes, al alimón pulsaremos ahora otras dos teclas: control y la letra c. Et...voila!, que diría el padre de la filosofía moderna. Llega el momento de estirar el asunto todo lo que nos haga falta y convenga. Después de hacer este otro punto y aparte, basta con tocar simultáneamente las teclas control y la letra v. Sí. Me he dado cuenta de que escribir de filosofía no es tan complicado como dicen. Evidentemente hay que tener una noción del asunto que vas a tratar. Pero no demasiado, ¿eh? Tampoco hay que echarse a temblar. Imaginación y poco más. Supongamos, por ejemplo, que siguiendo la doctrina de Descartes, pretendemos referirnos al teorema de Euler sobre los poliedros, o si nos vamos más allá, al discurso del método para dirigir bien la razón. Pues bueno, con lo dicho es más que suficiente. No hace falta adentrarse en meditaciones metafísicas ni llegar a la psicología existencial de Sartre, al racionalismo de Spinoza o a la filosofía del absurdo de Camus. Desde ese momento, como la gente no va a prestar atención a tus tonterías, se hace punto y aparte y se pasa la acción. Inicialmente se pulsan a la vez las teclas shift y la flecha que señala hacia izquierda, y en el instante en el que todo el texto se ha puesto en negativo (lo que los técnicos denominan como "definido") hasta llegar a la primera palabra escrita, del mismo modo hicimos antes, al alimón pulsaremos ahora otras dos teclas: control y la letra c. Et...voila!, que diría el padre de la filosofía moderna. Llega el momento de estirar el asunto todo lo que nos haga falta y convenga. Después de hacer este otro punto y aparte, basta con tocar simultáneamente las teclas control y la letra v. Sí. Me he dado cuenta de que escribir de filosofía no es tan complicado como dicen. Evidentemente hay que tener una noción del asunto que vas a tratar. Pero no demasiado, ¿eh? Tampoco hay que echarse a temblar. Imaginación y poco más. Supongamos, por ejemplo, que siguiendo la doctrina de Descartes, pretendemos referirnos al teorema de Euler sobre los poliedros, o si nos vamos más allá, al discurso del método para dirigir bien la razón. Pues bueno, con lo dicho es más que suficiente. No hace falta adentrarse en meditaciones metafísicas ni llegar a la psicología existencial de Sartre, al racionalismo de Spinoza o a la filosofía del absurdo de Camus. Desde ese momento... ¿A que no es tan difícil?

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