16/2/13

ENTRE OBSCENO Y PROCAZ

En situaciones como la que presenta el Valencia CF es fácil  convertirse en persona antipopular. Por eso cuando se mira el presente hay quien prefiere hace castillos de naipes con la vuelta de la Champions. Pero si París invita poco al optimismo, lo social...
Desde que se hizo público que la Generalitat haría efectivo el pago a la intervenida Bankia de los 4,8 millones de euros correspondientes a los intereses del aval dado a la Fundación Valencia, todos sabíamos qué iba a ocurrir. Una cosa es que indigne la situación, que más que indignar, encoleriza por cómo afrontan los políticos la realidad. ¡Con mis impuestos, no! Y otra que el pago fuera ineludible, lo que nos lleva a repetir reflexiones sobre por qué se ha llegado a donde se ha llegado y qué responsabilidades se han exigido a quienes, como Feghouli con su Audi, condujeron la nave sin carnet o sin puntos, y como tantos otros acabaron yéndose de rositas.
En una orilla aseguran que no había más alternativa que pagar para poder seguir negociando cómo se solventa el  montante real, que son 81 millones. Desde la otra, la oposición califica de vergonzoso que se utilice el dinero público para el fútbol.
Pero no es necesario formar parte de ninguna oposición para decir que resulta, cuanto menos obsceno, que la Administración haya utilizado la tijera en la Educación, la Sanidad... y en cambio el IVEF presupuestara dinero para tapar los agujeros del Valencia. Claro que 44.000 aficionados son más votos que los de 400 familias con niños autistas. ¿verdad? Peligran centros ocupacionales, pero a éstos se ve que o no saben que son, o les da lo mismo. ¡Ah! Y a finales de marzo el Valencia, como club, ha de hacer frente a otros 200 millones.
Después de ver en el último partido a Alberto Fabra, sentado en el palco como "nuevo dueño", se amontonan las preguntas: ¿El jefe del Consell cobra menos que Llorente? ¿Dará el visto bueno a las renovaciones millonarias? ¿Acabará siendo él quien oiga algún "vete ya" si las cosas van más mal de lo que van...?
501 (Publicado en Las Provincias, el 15 de febrero de 2013)

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