31/12/11

Mis dibujos (106)

Libertad

30/12/11

Refuerzos de invierno

Aquí no habrá sorpresas ni regalos de Reyes. Se acaba el año y aunque en muchos equipos es momento de hablar de soltar lastre y aportar refuerzos, en el Valencia tienen claro que no va a haber salidas ni llegadas. El club ha cerrado filas para evitarlas. Ese ha sido el mensaje institucional. El director deportivo se muestra reacio a que se vayan jugadores o a la incorporación de otros y el entrenador ha asegurado que no se debe perder potencial, aunque tanto uno como otro acaban su discurso con la consabida coletilla de no dar un portazo definitivo, porque en el mundo del fútbol tampoco se puede decir este cura no es mi padre.

La lectura del planteamiento es totalmente económica. Está claro que no se ha encontrado lo que se busca (bueno, bonito y barato) y que además no hay cacahuetes para expedir el pasaporte a quienes lo están pidiendo a gritos, en unos casos de palabra, en otros con sus obras, desde hace tiempo.

La postura de Braulio Vázquez es lógica. Ya se ha gastado cerca de 33 millones y ahora que la caja se queda tiritando por el aguinaldo a Javier Gómez, pues como que no es el momento. Aparte de que no encuentra el vellocino de oro, antes de pensar en reponer existencias primero tendría que abrir la puerta y dejar correr el aire fresco. Vamos, lo que deberían haber hecho anteriores rectores con lo del campo nuevo: vender las parcelas antes de empezar a amasar el cemento.

Unai tampoco puede decir mucho más de lo que ha dicho, aunque en el fondo seguro que le agradaría que por lo menos se fuera un central y le trajeran otro. La verdad es que no sé para qué, porque como sabe que su continuidad, si es que continúa, depende de los resultados, nunca ha sido dado a las rotaciones, y menos a mirar hacia la cantera.

Por eso, a los refuerzos de invierno les llamaremos refuerzos de invierno, al sol le llamaremos Lorenzo y a la Luna, Catalina.


343 (Publicado en Las Provincias, el 30 de diciembre de 2011)









Mis dibujos (105)

Napoleón y su guitarra

29/12/11

Gómez, del poder al florero

Cuando a alguno le contaron ayer que Llorente había amortizado a Javier Gómez, lo primero diría es, “¡Este me la quiere colar!”. 28 de diciembre. Era el día de las bromitas, y aunque afortunadamente eso ya está algo demodé, siempre aparece algún listillo que permanecía al acecho, esperando el momento del despiste para tratar de dar la nota y dárnosla con queso.

Pero la cosa iba en serio. Tan en serio como cuando hace año y medio el presidente del Valencia se fundió al director deportivo Fernando Gómez, aunque la amortización de ahora cuesta cinco veces más, porque supone en torno al millón de euros.

La salida de Javier Gómez del área directiva no es una sorpresa del todo, aunque plantea una serie de interrogantes que sí pueden acabar en sorpresa. El club lo aclarará en breve. Sí, seguro que lo hará, porque es lo menos que se merece el socio, y porque además es conveniente hacerlo para evitar especulaciones. Como lo de las parcelas, que también merece una explicación. Con la letra pequeña todos sabemos lo que pasa, y si no que se lo pregunten a ese cliente de la CAM que hizo un depósito a plazo y resulta que el vencimiento es para el año 3.000.

En poco tiempo sabremos si la salida de Javier Gómez ha sido una decisión unilateral de Llorente, de Bankia, de los dos, si consensuada con él, que me da en la nariz que sí, porque continúa como vicepresidente y consejero aunque sin sueldo (conociendo a Javier, en cierta manera sorprende, como también asombra el hecho de que no coloquen a nadie en su puesto).

Seguro que el club informa muy pronto, y entre otras cosas explica si Javier continua interviniendo en las operaciones financieras (fichajes, traspasos y demás). Luz y taquígrafos. Las inocentadas han pasado. ¿Después de tanto poder va a acabar en un cargo florero?


342 (Publicado en Las Provincias, el 29 de diciembre de 2011)









Mis dibujos (104)

La ratita de Hamelin

28/12/11

Felices malversaciones y próspero cohecho nuevo

Publicado en Valencia Fruits, nº 2.519 (28-12-11)

Mis dibujos (103)

Ilegalidades inamovibles

27/12/11

Un audífono para Del Bosque

Lo han reclamado hasta desde Madrid, que ya sabemos que es mucho reclamar. No sólo se desgañita la grada de Mestalla. ¡Soldado, selección! Cada vez hay más voces. Y aunque queda mucho para que Del Bosque de la lista definitiva para el Europeo (el 15 de mayo), antes está, por ejemplo, el amistoso con Colombia, del 9 de febrero. Veremos. De momento el delantero centro del Valencia despide el año 2011 con un bagaje de envidia (32 goles en 47 partidos) que suena más que el repique en la puerta de un seleccionador que presenta ciertos problemas auditivos, porque si no, no se explica.

Le está constando al duque, que a mediados de mayo dará la lista definitiva para el Europeo. Ahora pueden decir misa que él, erre que erre, no escucha. ¿Cuestión de audífono? Me da en la nariz que incluso hasta Pedro Cortés le ha debido de comer la oreja para que convoque a Soldado. Como si lo viera. Cuando han coincidido en un aperitivo y han hablado distendidamente de fútbol, el ex presidente del Valencia y actual delegado del equipo nacional seguro que ha sacado el asunto. Genio y figura. Lo imagino en un gesto muy habitual suyo, el dedo índice de la mano derecha levantado, balanceándolo lentamente adelante y atrás, al tiempo que le espeta categórico: “¡Vicente, te vas a equivocar si no te lo llevas…!”

El europeo de Polonia y Ucrania no debe presentarse como un sueño para el futbolista del Valencia, sino como el resultado de un trabajo bien hecho. Nada de regalo de Reyes ni otras zarandajas. Lo dicen las cifras. Los 0,68 goles de promedio por encuentro le han convertido en el mejor delantero español del año, por delante de los registros de Torres, Llorente, el lesionado Villa, Negredo o Raúl. Pero además Roberto tiene la ventaja de que su brioso temperamento lo deja para los partidos y fuera mantiene la serenidad y los pies en el suelo. Ni una palabra más alta que otra. Ya habla bastante en el campo mientras Del Bosque pide hora en el otorrino.


341 (Publicado en Las Provincias, el 27 de diciembre de 2011)





Mis dibujos (102)

Quijote

26/12/11

Mis dibujos (101)

¿Dónde irá a parar?

25/12/11

Mis dibujos (100)

Deforestación

24/12/11

Mis dibujos (99)

¡Cotamina, contamina, que algo queda!

23/12/11

Unai ni sorprende ni confía

Sólo en el sorteo para los emparejamientos de los octavos de final de la Copa, que se celebra hoy, puede aparecer una sorpresa al Valencia, porque el Cádiz no pasó de quererlo. Lo intentó y lo intentó sin acierto y como además a la hora de defender se convirtió en una especie de madre Teresa de Calcuta, pues eso: nada de nada.

Antes del partido el sonrojo del Manzanares, del Madrigal o del Villamarín podían pesar a modo de advertencia, por el empate sin goles en la ida y porque los débiles a veces se rebelan y dan el sobresalto, con el añadido de que algunos favoritos van de mal en peor y así les luce el pelo. De momento ya han ido por el aire un par de entrenadores y la confianza de otros ha bajado varios peldaños.

Unai Emery no quería entrar en esa batalla. Sabía que ayer se jugaba mucho. El Valencia tenía que ganar y al mismo tiempo agradar a los pocos aficionados que acudieron al recinto de Artes Gráficas. (Por cierto, ¡vaya horas!) La victoria, pues, era una obligación para pasar unas Navidades tranquilas. Pero no sólo por evitar críticas y recuerdos desagradables (Guadix, Novelda, Las Palmas o Lleida). Está el prestigio y no ha hecho falta que a nadie se le vendiera que la Copa, y también la Europa League, son caminos con bastantes menos curvas que la Liga, a no ser que el bombo de hoy dé un disgusto, porque se van a conocer todos los emparejamientos hasta la final.

La alineación que presentó Unai, con apenas una o dos excepciones (Albelda en el banquillo y Feghouli descartado), fue la de gala lo que tampoco supone ninguna sorpresa, porque el entrenador no está en disposición de jugársela. Un revés no se lo iba a pasar nadie.

Por eso tampoco fue sorpresa la presencia de Soldado como referencia (¿dónde estaban Alcácer y Bernat) ni que ante la ausencia del lesionado Alves, el técnico diera la portería a Guaita, aunque siga con problemas en la mano. Y, decíamos ayer… Esa es la confianza que se tiene con Pereira. Un fichaje, cuanto menos, controvertido.


340 (Publicado en Las Provincias, el 23 de diciembre de 2011)









Mis dibujos (98)

Al repetidor desconocido

22/12/11

Mis dibujos (97)

La energía

21/12/11

Uno, dos y tres porteros

En las últimas semanas Vicente Guaita ha estado en boca de todos y estos días se han acentuado los comentarios, probablemente porque el Valencia no ha clarificado la situación física que atraviesa el futbolista. Aparte de que se pueda pensar que Unai prefiere a Alves en la portería, y que estaba esperando la excusa oportuna para llevar a cabo el relevo, la realidad determina que un edema óseo en la mano derecha tiene la culpa de que el portero de Torrent no esté en condiciones de optar a la titularidad.

Sin embargo, paradójicamente, eso no ha sido obstáculo alguno para que el entrenador le incluyera en todas las convocatorias e, incluso, como hizo la semana pasada en el partido de Copa del Rey, en Cádiz, le encargase la defensa de la portería.

La situación sorprende o, cuanto menos, resulta curiosa, ya que desde que un mercancías llamado Fernando Llorente le pisó la mano derecha, y eso fue a finales de octubre, Guaita no ha descansado un solo partido. Disputó tres encuentros más como titular y luego, como suplente ha entrado en todas las convocatorias. Eso sí, sometiéndose a infiltraciones, incluso para poder ejercitarse. El dolor le obliga a tratamiento y a lucir una férula que le inmoviliza media mano.

Doctores tiene la Iglesia, aunque eso no quita para sopesar si hubiera sido más conveniente frenar las ganas de competir que pueda tener Guaita y darle el necesario descanso con el fin de que el edema se reabsorba antes de que vaya a más y no quede otra solución que la quirúrgica. El mundo del fútbol está repleto de ejemplos, y en los últimos días hemos visto alguno cercano de ese signo.

Y en ese contexto, como el pensamiento es libre, también se puede reflexionar sobre las necesidades de Unai, su criterio y la escasa o nula confianza que tiene con el tercero portero, Cristiano Pereira. ¡Esa es otra!

339 (Publicado en Las Provincias, el 21 de diciembre de 2011)








Mis dibujos (96)

20/12/11

¡Los viejos rockeros nunca mueren!

Hoy por unas horas hemos retrocecido unos añitos (20-12-11)

Referendum: ¿Quiere que Camps vaya bien vestido?

Publicado en Valencia Fruits, nº 2.518 (20-12-11)

Mis dibujos (95)

De tí para mí, no sé que quise representar
(pero no lo airees)

19/12/11

Soldado y Raúl

Todavía estaba David Villa doliéndose sobre el césped del estadio japonés donde el Barcelona disputó el Mundial de clubes, cuando en las redes sociales se desató una batalla tan cerrada y fiera como la guerra dialéctica que surgió en las tertulias. Aún no está claro si la lesión del Guaje le apartará de la Eurocopa y muchos ya le habían enterrado y le estaban buscando un sustituto. Deprisa, deprisa.

Enseguida se habló de la posible vuelta de Raúl González al equipo nacional y eso a algunos les escandalizó más si cabe que el aumento de las cifras del desempleo. Quizá des que no se detuvieron a pensar que el ex madridista lleva diez goles en Liga (aparte de otros tres en la competición europea).

Pero claro, esa cifra ayer la superó en uno el valencianista Roberto Soldado, con once (además lleva otros cinco en el torneo continental), y lógicamente también debería entrar en las quinielas de los futuribles para el campeonato de Polonia y Ucrania, como ayer coreó todo Mestalla.

En esto del fútbol, y más concretamente en el asunto de Raúl, parece que vale lo de “estás conmigo o contra mí”. Que alguien desee que Roberto Soldado esté en el equipo nacional es tan lógico como justo, porque los números (y el juego) desde hace tiempo avalan al delantero valencianista. Pero una cosa no quita la otra para que haya quien considere que el jugador Schalke 04 también haya hecho méritos para estar ahí, o quien piense que Del Bosque debería de llamar al sevillista Negredo, al bilbaíno Llorente o el joven Adrián, del Atlético.

El elogio a un futbolista no debería de ser excluyente para valorar a otros. Y menos llegar al insulto y a la descalificación, que no es más que el recurso de los mediocres.

Soldado se ha hecho acreedor a una plaza en “la roja”. Pero eso es desde hace tiempo. No es de ahora. Y desde luego su presencia ni mucho menos debería ir condicionada la posible ausencia del Guaje. Una cosa no tiene que ver con la otra.

338 (Publicado en Las Provincias el 19 de diciembre de 2011)










Mis dibujos (94)

Supraman

18/12/11

Mis dibujos (93)

Siga la flecha

17/12/11

Mis dibujos (92)

Se abre la veda

16/12/11

Las cifras de un club

Hay gente que le tiene aprensión a los números. No les gusta una pizca. Probablemente ya se le atragantaron desde chavales, cuando aquello de los Cuadernos Rubio, y ahora siguen sin soportarlos. En el momento en que aparecen en el fútbol, tratan de pasar de soslayo. Simplemente se quedan con el guarismo del partido, con el 2-0 o con el resultado que sea. Porque lo único que pretenden es disfrutar del juego y, por supuesto, de la victoria de su equipo. Eso es realmente lo que de verdad les interesa.

A este tipo de aficionados, que en mayor o menor medida existen en todos los clubes, les importan tres cominos los dibujos y los sistemas de juego. Cuando oyen hablar del 4-2-3-1 o del 4-3-3, preguntan con ironía si delante es necesario poner el prefijo del pueblo del entrenador.

Son esos mismos seguidores que antes de un partido también pasan de las estadísticas y de los antecedentes. “Entonces fue entonces y ahora es ahora”, replican, porque entienden que poco tiene que ver que en el pasado su equipo tuviera aciertos o dificultades en determinada situación, o si lleva o deja de llevar varias temporadas consecutivas en lugares de privilegio. Su preocupación es el presente. El lugar destacado en la clasificación y que no se pierda un partido ni una eliminatoria a las primeras de cambio.

Claro, a este tipo de aficionados tampoco les inquietan lo más mínimo las cifras del club de sus amores, al que tienen como muy propio aunque sean conscientes de que es una SA. Cuando oyen hablar de operaciones financieras, no se detienen un segundo en leer la letra pequeña. Con tal de que haya buenos fichajes, el equipo siga ganando los partidos, haya un buen escenario y a la sociedad la vistan de gala, les resbala lo que haya que vender o qué y cómo se tenga que vender.

Sí, señor. En todos los clubes hay algunos aficionados a los que los números les provocan verdaderos sarpullidos.

¡Ah!, por cierto, el Valencia recibe el domingo al Málaga.


(Publicado en Las Provincias, el 16-12-11)











Mis dibujos (91)

Una línea y una tontería

15/12/11

Mis dibujos (90)

La rosca Monroe

14/12/11

Eso es una castaña

Llega Brennan, la de Bones, o Grissom, el de CSI, el que siempre se ajusta las gafitas antes de hablar, y suelta: "¡Eso es una castaña!" ¿Qué podríamos pensar? Lógicamente, una pista. Que entre los restos de un cadáver había aparecido "el fruto del árbol de la familia de las fagacae", porque nosotros, como ellos, también sabemos algo de botánica. ¿Verdad? Pues, no. Nos equivocaríamos ya que en el guión, tanto la doctora Huesos, como el criminalista y experto en entomología, se estarían refiriendo a las imágenes que ayer ofreció televisión desde el Ramón de Carranza.
Esto hay que tomárselo así. Como la gente se tomaba a aquel viejecillo, reseco y chicuelo que llamaban el Piyayo. No puede ser de otra manera. De otra forma acabaríamos de los nervios, muy enfadados, y no es el caso porque ahora mismo existe una enorme ilusión en el valencianismo ya que el club acaba de hacer público que va a reanudar las obras del nuevo Mestalla. ¡Vaya lo no por lo otro!
Ya sabemos que la Copa es para ilusionar, que es lo que se decía antes del desplazamiento a Cádiz. Seguramente el Valencia lo que pretendió ayer con su juego en el Carranza fue aplazar la ilusión a la semana que viene y ofrecerla en Mestalla, coincidiendo con el sorteo de Navidad. Incluso habría que darle las gracias porque aunque el rival no debería de inquietar, de esta forma el suspenso de ayer se transforma en suspense. ¡Todo está programado, no creas!
Lo de recobrar la ilusión y la confianza habrá que aplazarlo unos días. Parece que no hay prisa. Unai se refirió a hacer algo en este torneo y de momento el algo ha sido la castaña que encontraron los criminólogos... y los que vieron el partido. La oportunidad de adornar los elogios a la labor económica, se echó por la borda entre marismas y playas, en la bahía de Cádiz. Aunque, olvidémoslo porque tenemos la Navidad a la vuelta de la esquina, y es un momento de paz, turrones y castañas. Pero de castañas pilongas.
336 (Publicado en Las Provincias, el 14-12-11)

Mis dibujos (89)

Mi hija construye a su manera

13/12/11

Detritos municipales

Publicado en Valencia Fruits, nº 2.517 (13-12-11)

Mis dibujos (88)

El chicle de Adolf

12/12/11

El sentido común

A algunos aficionados del Valencia les debe de ocurrir lo que al chavalín de 'El sexto sentido'. No es que vayan a ir diciendo por ahí que ven muertos, pero seguro que se sienten tan confundidos como el niño de la película. Porque debe de resultar sorprendente ver que el equipo de sus amores, a pesar de que es el tercero de la Liga, va dando tumbos y se desvanece. Aunque, claro, eso tampoco es nada nuevo.

En los últimos días los aficionados del Valencia se han llevado dos desagradables sorpresas, a pesar de que la sinceridad obliga a decir que para el partido de Londres se había derrochado más confianza de la que cabía en el frasco. Pero el desaguisado de Sevilla sí que ha escocido, y aún sigue picando, porque los puntos ante a este tipo de rivales son los que al final de la corrida permiten que el equipo pueda estar más cerca de los dos primeros.

Ahora el Valencia se dispone a afrontar un nuevo camino, el de la Copa del Rey, que muchos consideran propicio para alcanzar un título. A lo mejor son los mismos que lo esperan en la Europa League que ojalá y ocurra. Sin embargo, en estos momentos en lugar de tratar de construir castillos en el aire o de buscar cortinas de humo, lo más sensato es mirar por dónde se pisa, y aunque el entrenador se descuelgue diciendo que se aprende más de las derrotas, hay que hincar los codos y aplicarse para dar una alegría. Es cosa del sentido. Del sentido común. Para no seguir viendo muertos.


335 (Publicado en Las Provincias, el 12 de diciembre de 2011)





Mis dibujos (87)

La finca de los lápices (1)

11/12/11

Mis dibujos (86)

Prisión GS1-128

10/12/11

Mis dibujos (85)

El lector empedernido

9/12/11

Mis dibujos (84)

El jardinero de las leras

Psicología positiva

Hay qué ver lo mudables que son los puntos de vista. Se puede decir que el Valencia ha sido eliminado de la Champions y también que a partir de ahora el equipo de Mestalla competirá por la Europa League. Una cosa entraña la otra y por lo tanto viene a ser igual, pero sin embargo no es lo mismo. Como tampoco lo es decir que se ha perdido el partido o que no se ha podido ganar, que es la expresión que utiliza quien siempre ve el vaso medio lleno.

Hace unos días leí que la Universidad de Valladolid ha puesto en marcha un curso sobre «psicología positiva y sentido del humor», terapia que aseguran que aporta numerosas ventajas en el rendimiento educativo y laboral, y es de suponer que también lo hará en el plano deportivo.

Por eso hasta cierto punto es normal que se busque un bálsamo para curar la decepción que ha supuesto el adiós a la Champions, aunque tengo la impresión de que se están echando demasiadas flores a un torneo que siempre se ha considerado menor (lo es en lo deportivo y en lo económico) y, como el de muchos es consuelo de algunos, a modo de mérito se proclama que junto al Valencia estarán el United, City, Oporto o Ajax, que también se despidieron de forma prematura.

¡Allá el señor Ferguson, el jeque y la sota de copas con sus problemas!, que nada tienen que ver con los del Valencia. Conviene recordar qué somos y a dónde vamos, y sobre todo preguntarnos por qué se produjo la eliminación (el Valencia se ha dejado en el camino mucho prestigio y mucho dinero) y también por qué el equipo es tercero en la Liga.

Cada cual tiene su punto de vista y aplicarle el prisma del optimismo beneficia hasta a los más enfermos. Pero tampoco debe de ser muy bueno refugiarse siempre en lo de que es «un club en crecimiento», porque una cosa es la «psicología positiva» y otra el «sentido del humor». Al menos en fútbol.


334 (Publicado en Las Provincias, el 9 de diciembre de 2011)









8/12/11

Mis dibujos (83)

El As ganador

7/12/11

Souvenir de Stamford Bridge


Con mi brother Salva Folgado, en Stamford Bridge (6-12-12).
NOTA: Si la foto es mala, la culpa es del Vallde, que fue quien la hizo.

Mis dibujos (82)

Hace falta algo más

La realidad desvanece las ilusiones. Eso ocurre muchas veces, especialmente en Navidad, que es cuando la gente juega más a la lotería. Llegado al momento de la decepción, porque ese año el gordo ha pasado de largo, rápidamente conviene poner los pies en el suelo y contemplar la Europa League como lo que es, una pedrea; la posibilidad de mantener la imagen continental, aunque es evidente que debe jorobar mucho ver que se esfuman cerca de cinco millones de euros, que es la cantidad que hubiera ingresado el club de haber conseguido la clasificación para los octavos de la Champions.

Sin embargo las derrotas también escuecen por el daño moral que entrañan. Al equipo y a los seguidores. Especialmente a estos últimos, porque la mayoría sienten los colores como mucho más que propios. Es algo más que una ilusión.

En cualquier lugar emblemático de Londres ayer se escuchó hablar en valenciano. En Westminster, en Piccadilly, en Trafalgar Square, y en Harrods y Liberty, claro, se dejaron notar los más de dos mil aficionados que acudieron con toda la ilusión del mundo para acompañar y arropar a su equipo, sin encontrar respuesta en el juego de los suyos, frío como la noche londinense.

Resulta curioso que este partido no se haya correspondido en absoluto con el pensamiento previo al inicio de la liguilla, porque se presumía de mero trámite. Todos imaginaban que para entonces el líder de la competición sería el Chelsea y que el Valencia tendría asegurada la segunda plaza. Castillos en la arena, y por eso el Valencia deberá hacer ahora reflexión de lo que ha sido su trayectoria en el torneo, con más decepciones que alegrías.

La Europa League queda ahora como una nueva oportunidad. Como la opción que tiene el jugador que después de que la suerte le haya regateado en el gordo de Navidad, mira el sorteo del Niño como la oportunidad reparadora, aunque en esto se necesita algo más que suerte. Bastante más.


333 (Publicado en Las Proovincias el 7 de diciembre de 2011)









6/12/11

Mis dibujos (81)

Natación (espalda)

5/12/11

Mis dibujos (80)

Corazones (y un anular)

La gran decisión

La decisión que ayer por la mañana tomó Unai de prescindir de Miguel Brito para el partido en Stamford Bridge, desencadenó todo tipo de comentarios y provocó que las redes sociales echaran humo. Ya había conclusión incluso antes de que nadie se detuviera a preguntar si la medida obedecía a una cuestión disciplinaria, porque el futbolista acusa algún problema físico o si es que el entrenador consideró que no está perfectas condiciones.

Las irresponsabilidades de Miguel han sido una lluvia persistente sobre mojado que ya no sorprende a nadie, aunque da tema da para los corrillos. Ocurre como con los ininterrumpidos espasmos que a diario sacuden la sociedad en que vivimos. Llega un momento en que da la sensación de que todo nos parece tal habitual que nos encojemos de hombros aunque, eso sí, ponemos a caldo a quienes los que pueden hacerlo deberían de ponerlos frente a la justicia y de patitas en la calle.

Cuando Unai apartó a Miguel del partido del sábado, los antecedentes invitaban a pensar que se trataba de un castigo figurado. Una forma de hacer ver a la galería el enfado por la última del luso y a la vez darle descanso, al igual que dejó en el banquillo a jugadores que estarán en la alineación inicial de Londres.

Pero no. Además Miguel no aparece en el parte de lesionados, lo que indica que Unai ha dicho hasta aquí hemos llegado. Ya no le pasa una más porque la plantilla se iba a descuajaringar, aunque muchos, incluso seguro que él mismo, seguimos pensando que es de los mejores en su puesto.

Más sencilla que la de Sophie, la decisión de Unai conllevará críticas y elogios. Ambas posturas se podrán argumentar y defender. Unos pensarán que por Miguel no se gana un partido (o se empata a cero, que es lo que al menos necesita el Valencia), y quienes dirán que la medida se ha hecho esperar mucho. En todo caso, es bueno si ha sido por dar fortaleza al grupo.


332 (Publicado en Las Provincias, el 5 de diciembre de 2011)









4/12/11

Mis dibujos (79)

El podio

2/12/11

Mis dibujos (78)

Zumo de música

Mis dibujos (77)

La biblioteca del alma

No diga gol, diga Kempes

Con Kempes me ocurre algo parecido a lo de aquella viejecita que estaba confesando sus devaneos y el cura, sorprendido, le dijo: «Pero, hija, de eso hará mucho tiempo, ¿no?». Y ella, sonriente, le respondió: «Sí, claro, claro. ¡Pero es que me gusta recordarlos!»

Hace más de veinte años que Mario colgó las botas y me gusta rememorarlo, vestido de Senyera o de blanco, y evocar los partidos míticos, sus jugadas, sus goles. Pero también su comportamiento fuera del terreno de juego. Su conversación amena y su amistad, porque durante la temporada 92-93 muchas veces compartimos mesa y mantel siguiendo al Valencia, él en sus inicios como analista, entonces para la cadena SER, siempre al lado del compañero José Luis Chiclana.

Nunca es tarde si la dicha es buena y el homenaje que mañana le tributará Mestalla se hacía esperar. Lo de abril del 93 no fue un homenaje sino una despedida, y en sus años aquí Mario le dio mucho lustre al Valencia. Cuestionado cuando llegó (porque le hicieron debutar apenas bajarse del avión y erró un penalti), no tardó en convertirse en un futbolista mítico, al que añoran incluso quienes no habían nacido cuando con Argentina fue protagonista en Mundial'78 y en con el Valencia en la Copa del 79 y en la Recopa y Supercopa del 80. Mario ha sido el más grande del pasado reciente y aún parece escucharse el eco de aquel «No diga gol, diga Kempes», que tronaba en Mestalla.

"El Matador", como le bautizó el veterano periodista de Radio Rivadavia, José María Muñoz, no sólo proporcionó éxitos deportivos. También dejó dividendos, porque aterrizó del Rosario a cambio de 32 millones de las antiguas pesetas y en el tramo final de su carrera el River ingresó 150 millones en las arcas de Mestalla. ¡Casi na! Goles, espectáculo y dinero. ¿Quién da más? Máxima rentabilidad. Por eso ahora el Valencia quiere reconocer a Kempes de forma oficial, que ya tocaba, ¿no les parece?

331 (Publicado en Las Provincias, 3 de diciembre de 2011)






30/11/11

Miguel, recuerda a tu papá

Nunca hagas lo que no te gustaría que te hicieran a ti». La frase la pronunció Miguel Brito en el transcurso de una entrevista que le hice en mayo del año pasado. Hablábamos de forma distendida de muchos asuntos. De su vocación, de su infancia, de sus pasiones -que son sus hijas Débora, Rafaela y Tatiana, sus padres y el fútbol-, se explayó en lo satisfecho que se siente por el apoyo que en todo momento ha tenido de la familia y respondió con ese «nunca hagas...» al pedirle uno de los consejos que cuando era niño le dio su padre.

Hago mención a todo esto antes de hablar de la nueva polémica que envuelve a Miguel Brito, porque debe quedar claro que en la distancia corta el portugués es un buen tipo, aunque desde luego un poco niño, como calificaba a los futbolistas el entrañable doctor Arregui. Esa falta de responsabilidad de imberbe es la que le pierde y la que en demasiadas ocasiones le ha hecho meter el pie en el charco sin llevar botas de agua. Y ahora mismo ya diluvia sobre mojado. El enésimo retraso en un entrenamiento ha vuelto a poner al futbolista y al club en boca de todos, aunque Unai quiso disfrazar la situación.

Es más de lo mismo. Al inicio de esta temporada Miguel ya desbordó el vaso que estaba rebosando desde hacía algún tiempo. Parece que lo del portugués y lo de pegarse las sábanas es algo de carácter patológico. Un asunto sin solución, y es una pena porque no hay duda de que se trata de un buen futbolista.

A Miguel le quedan poco más de seis meses de contrato y en junio sucederá lo lógico. Pero, ¿y hasta entonces? También lo normal. Que Unai seguirá contando con él porque es el mejor en su puesto, que la responsabilidad de adoptar medidas (sanciones económicas) sigue siendo del club, y que él, por respeto a sus compañeros, debería de hacer memoria y recordar aquel consejo que cuando era niño le dio su papá.


330 (Publicado en Las Provincias, el 30 de noviembre de 2011)







El cataclismo


Publicado en Valencia Fruits, nº 2.516 (29-11-2011)

28/11/11

Mis dibujos (76)

Sociedad culta (Papers, 1986)

Un voto de confianza, pero...

El tiempo es cambiante, como las personas. En el aspecto meteorológico hay pocas variaciones, aunque estos últimos días parece que ha empezado a refrescar un poco, ¿no? Bueno, pues con el Valencia pasa lo mismo. Se nota un ligero cambio. Incluso diría que pocas veces la credibilidad y el prestigio de Unai Emery han estado tan valorados como ahora mismo.

Al igual que en breve tenemos que sacar del armario prendas de más abrigo, con el transcurrir de los partidos también se puede hablar de un antes y un después del equipo, que lo establece los cuatro partidos que se han disputado en el mes que estamos a punto de despedir. Desde el triunfo sobre el Leverkusen, pasando por la victoria ante el Levante, hasta la del sábado, frente al Rayo, aparte de que a pesar de la derrota, se computa en el haber el espíritu que hace dos semanas puso el equipo al enfrentarse al líder, Real Madrid.

En este periodo el Valencia ha ofrecido las mejores sensaciones (aunque sería bueno que el árbol no nos impidiera ver el bosque) y muchos de los detractores del entrenador se han subido al tranvía de los resultados y los elogios y ahora le valoran más.

La premisa de cualquier equipo es ganar y el Valencia consiguió los tres puntos en Vallecas. Bien. Pero la exigencia del guión reclamaba bastante más de esa apuradita victoria, sobre todo porque enfrente hubo un equipo que lleva camino de convertirse en carne de Segunda. Y refugiarse en que unas jornadas antes ganó al Málaga no es más que darle lustre a una simple anécdota de una Liga descompensada. Tan anécdota como en anécdota deben de quedar las dificultades que el equipo de Emery tuvo en Vallecas. Voto de confianza sí, pero sin olvidar que detrás del árbol está el bosque. Vamos, que hay que lidiar en la Champions, en la Copa y además todavía quedan dos tercios de campeonato.


329 (Publicado en Las Provincias, el 28 de noviembre de 2011)







25/11/11

Soldado, una china en el zapato

Solamente por el hecho de haber conseguido un récord histórico hay que quitarse el sombrero. Siete goles no se marcan todas las semanas ni todas las semanas un delantero, como ha hecho Soldado, marca tres goles en el mismo encuentro, aunque esta temporada el chavalote está que se sale con ocho dianas en la Liga y cinco en la Champions.

Ahora mismo lo más realista sería elogiarle; tanto como oportunista resultaría hacerle la pelota a Unai, aunque siempre habrá quien le recuerde el error con las fichas federativas que obligó a la alineación inicial de Feghouli (otras veces titular, ¿eh?) en lugar de Piatti, que era el elegido. Se dirá que si patatín y que si patatán, pero no será más que especular. Ni una golondrina hace verano ni se debe menospreciar el trabajo de un entrenador que en su tarjeta de visita presenta cifras que otros quisieran. Una cosa es que te guste el juego del equipo y otra el rendimiento que consigue.

Ahora bien, ensalzar a Soldado no tiene réplica, y creo que únicamente se escucharía un silencio. El del señor marqués. Roberto se ha convertido en una china en el zapato de Del Bosque. En esa piedrecilla que jode. Todo indica que el seleccionador teme abrirle una puerta porque probablemente con sus goles la dejaría de par en par y eso significaría tener que cerrársela a otros en los que confía más... o con los que no tiene viejos asuntos pendientes, que esa es otra. Porque ¿y si le da bola y responde? Menuda papeleta, ¿no?


328 (Publicado en Las Provincias, el 25 de noviembre de 2011)





24/11/11

Mis dibujos (75)

23/11/11

Lo que cuenta es el presente

Lo del sábado ya no cuenta. Ya ha pasado, ¡hala! El Genk está ahí y el partido de hoy es demasiado importante como para que le reste protagonismo el manotazo de Higuaín, que es tan historia pretérita como el batacazo que un día después se dio el partido socialista en las urnas. Claro que, como todo esto ha sido tan gordo, y a pesar de que el desenlace no sólo era previsible sino que pocos lo dudaban, se continúa hablando de una cosa y de otra.

En el deporte, aparte de las visiones partidistas, se sigue discutiendo si se utilizan diferentes varas para medir y si hay equipos que desde hace años disfrutan de privilegios. Pero también se argumentan las carencias de un entramado caduco que no sabe evolucionar para evitar errores como el del sábado. Y en lo que atañe a todo el personal, rara es la tertulia en la que no salga a relucir la tendencia de voto, que ha estado claramente influenciada por la crisis, el desempleo y el desengaño.

Pero, a lo que íbamos, el valencianismo ahora sólo ha de pensar en el Genk, al que el equipo está obligado a ganar hoy en Mestalla para seguir dependiendo de sí mismo en su camino hacia los octavos de la Champions.

Y con independencia de que acompañe la meteorología, habrá que prestar especial atención a la respuesta que ofrezca el aficionado, después del apoyo que proporcionó en el partido frente al Madrid. Pero, sobre todo, si el equipo es capaz de enganchar al público de la misma manera que lo hizo entonces, en los cinco minutos iniciales y especialmente en la segunda parte, tras ir por detrás en el marcador.

¡Ah! Y una ventaja para el supuesto de que, pongamos por caso, durante el partido hubiera un penalti por manos de un jugador belga. Como en Champions hay árbitros de área, no habría problema. Evitaría que se estuviera discutiendo sobre si existe una toma de vídeo en la que se ve la falta con claridad. ¿O no?


327 (Publicado en Las Provincias el 23 de noviembre de 2011)<p>









22/11/11

El PSOEPELIO


(Publicado en Valencia Fruits, nº 2.515 (22 noviembre 2011)

Lo que vimos y lo que fue

Los puntos de vista no siempre son coincidentes. Vamos a imaginar que así comienza una clase de filosofía y que el profesor expone a debate de los alumnos que el punto de vista de una persona es único y diferente al del vecino, y que nunca llegamos a ver lo absoluto en su totalidad.

Uno de los estudiantes levanta la mano, el profesor le da la vez, y aquél conviene que, efectivamente, cuando faltan otros puntos de vista, se corre el riesgo de equivocarse en la apreciación, pero proclama que sólo ocurre si quien tiene en su poder la prueba irrefutable niega la evidencia.

He querido imaginar un aula con alumnos debatiendo lo que desde la noche del sábado está en boca de todos. Si Higuaín cometió o no penalti en los minutos finales del partido de Mestalla. Lo que vimos y lo que fue. Hay una mezcla de observación, apariencia, razón, sentimientos... Quienes estaban más cerca del fondo norte, dependiendo de la perspectiva de su asiento, observarían la jugada con mayor nitidez que quienes ocupaban la zona opuesta. Pero quienes lo vieron por televisión, que ofreció distintas repeticiones desde diferentes ángulos, no deberían de tener motivo de duda. O sí, porque en ocasiones el interés o la pasión maquillan la realidad. Y quizá por eso el protagonista de la jugada miró al suelo, hizo una pausa y tomó aire antes de salirse por la tangente al responder al periodista que le preguntó si había cometido penalti o no.

Repetir que el mundo del fútbol está obsoleto es caer en redundancia. Los árbitros se pueden equivocar porque son humanos o sencillamente porque son malos. Los futbolistas pueden disfrazar la verdad y mentir para defender el color de quien les paga, pero en este caso, además, el dueño de las imágenes, enfadado por un quítame esas pajas, se puso la bufanda del sentimiento y trató de disfrazar la realidad.

Por eso hay que insistir para que esto cambie alguna vez. Hay métodos, técnicas y ejemplos en otros deportes para conseguirlo. No se trata de demostrarlo después. Es para que no se tenga que discutir.


326 (Publicado en Las Provincias el 22 de noviembre de 2011)









18/11/11

Parlem valencià?

Leo con estupor que deberíamos de empezar a aprender alemán, porque en pocos años esa será la lengua que se hablará en Europa. Quienes lo pregonan no aluden al fútbol, ¿eh?, se refieren a la política económica y defienden su postura a pesar de las palabras de Jean Claude Juncker, presidente del Eurogrupo, que termina de puntualizar que los teutones están bastante más endeudados que nosotros.

En el mundo del fútbol patrio también son muchos quienes desde hace tiempo vienen diciendo que sólo hay dos lenguajes en la Liga. Son los convencidos de que al final sólo se hablará con deje de Chamartín o con acento barcelonés. Y en este caso también han salido, como Juncker, advirtiendo de los endeudamientos y las ventajas económicas que disfrutan los clubes elegidos.

Pero mira por donde, resulta que hasta el momento en la competición se ha hablado también otro idioma: el valenciano. Pegadito a los galácticos aparece el equipo de Mestalla, que está decidido a demostrar que en esta obra aspira a bastante más que interpretar un papel de 'maldito', aunque es consciente de que mañana, frente al Real Madrid, deberá de rozar la perfección para poder superar a un rival plagado de estrellas, que ha mejorado en pegada y que lleva puesta la quinta marcha.

En estas circunstancias uno siempre se aferra a cuestiones como máxima atención, jugar al ciento veinte por ciento, apoyos, o a la proeza del Levante en la cuarta jornada.

Los números son un aval para el Valencia aunque a algunos su juego no nos entusiasme. Y sin obviar que no es tarea fácil, dado que hasta ahora en la Liga se ha hablado valenciano, no hay porqué poner en duda que se siga haciendo.
Estoy seguro de que si le preguntaran a Di Stéfano qué ha de hacer el Valencia para superar a su Madrid, repetiría la misma ironía de hace unos años, cuando se lo plantearon en una de las etapas en las que se sentó en el banquillo de Mestalla: «Marcar un gol más que ellos», espetó. Pues eso: Parlem valencià?

325 (Publicado en Las Provincias, el 18 de noviembre de 2011)









16/11/11

Mis dibujos (74)

La mona se viste de seda

Valor añadido

Siempre se ha dicho que añorar el pasado es correr tras del viento, pero no es menos cierto que el pasado siempre está presente y que para construir el futuro es importante recordarlo. Quizá por eso, en vísperas de la visita del Real Madrid a Mestalla, muchos aficionados valencianistas sueñan con que se reediten momentos brillantes, y se recrean en encuentros como el de la primera temporada de Unai al frente del equipo, que terminó con un rotundo 3-0.

Claro, que cada uno ve la feria desde su atalaya, y los madridistas se aferrarán a la goleada del último ejercicio, aparte de que esta temporada, más presionado, el equipo tiene mejor tino que en la anterior. Pero dejando al margen la bondad de las cifras, cada semana hay que desarrollar los argumentos y eso es lo que contará el sábado, sobre el nuevo tapete de Mestalla.

A pesar de que todavía no se ha cubierto siquiera un tercio de la Liga, el partido tiene pinta de que va a marcar bastante cosas. En los últimos días los aficionados hablan de lo mucho que esperan de su equipo. Siempre que llega el líder, un rival de enjundia, aumenta la pasión, y aunque después la visión de la grada determina que el juego del Valencia no acaba de ilusionar (¿qué fue antes, el huevo o la gallina?), hoy por hoy el equipo está en disposición de demostrar que la Liga no es sólo cosa de dos, como se dice. No, señor. Por lo menos, aún no, aunque la lozanía económica de merengues y azulgranas les haya dado para comprarse limusinas.

Si el partido termina con victoria madridista, el equipo de Mourinho se destacaría con siete puntos de ventaja. Demasiado ya. Pero si es el Valencia quien gana, la cabeza de la clasificación quedaría en un pañuelo. Y, aparte de eso, que sería mucho, el triunfo podría y debería de convertirse en un punto de inflexión, en una especie de banderín de enganche para darle un arreón a los seguidores, que en los últimos tiempos han quitado el pie del acelerador. Por eso para el Valencia se trata de un partido con valor añadido.


324 (Publicado en Las Provincias el 16 de noviembre de 2011)







15/11/11

¡Alfredo, huy que miedo!


Publicado en Valencia Fruits, nº 2.514 (15-11-11)

14/11/11

Jordi Alba, otro ejemplo

En los próximos días se va a hablar mucho de Jordi Alba. Desde Cataluña ya lo vienen haciendo repetidas veces y ahora, después de su segunda presencia en la roja, a pesar de la decepción del resultado (porque las derrotas siempre escuecen), como el valencianista disputó los noventa minutos para frenar a Walcott y lo hizo con eficacia, seguro que se repiten esos cantos de sirena e, incluso, empiezan a sonar desde otros lugares.

Jordi es de los jugadores que cobran menos de lo que rinde. Tiene contrato con el Valencia hasta 2013 y el club quiere ampliarlo y de paso aumentar la cláusula de rescisión, que asciende a 20 millones. Lógico, por su progresión.

En marzo próximo Jordi cumplirá 23 años, pero es un futbolista que ya hace tiempo que se graduó. Con carita de no haber roto un plato, a la chita callando se ha abierto camino en el concierto futbolístico español. En el verano de 2009 convenció a Unai de que podía estar en el primer equipo, pero no hay que olvidar el apoyo que tuvo del entrenador (al César lo que es del César), que le convenció para que retrasase su posición a la de lateral.

El caso de Jordi tiene más de un espejo en Mestalla. En la edad de cadete fue descartado por el Barça y tras pasar por el Cornellà el Valencia se llevó al juvenil «por cuatro pesetas». Un caso similar al de Silva o Mata, a los que en el Bernabéu también hicieron poco caso. ¡Cuánto Rappel suelto!
Los bajitos, que entonces no estaban de moda, hoy son protagonistas en sus clubes y en el equipo nacional. Estamos hablando de futbolistas que llegaron al Valencia con apenas bagaje y que han sido más que rentables. Prácticamente se formaron aquí y además su posterior salida representó muchos euros.

Por el momento sólo ha habido una aproximación del club y los agentes de Jordi. Un «tenemos que hablar», y aunque queda tiempo por delante, es conveniente mantenerse alerta para evitar lamentaciones (no hace falta decir nombres), porque aquí el que no corre, vuela.


323 (Publicado en Las Provincias, el 14 de noviembre de 2011)










11/11/11

Asuntos a porrillo

En cuanto se paraliza la Liga surgen más noticias que nunca. A porrillo. Hay que ver lo que da de sí una semana sin competición. En este sentido los bolos de la selección siempre han ayudado, eso sí, dependiendo de cuál fuera la trayectoria del equipo; los últimos resultados han influido para bien o para mal.
Esta vez, en los días previos al nuevo parón, los asuntos se han encadenado de forma consecutiva y, salvo un par de verdadera entidad, a los que hay que adornar con letras de neón, otros parecen extraídos con pinzas. De esos que huelen más que Emarsa, cantos de sirena que llegan de lejos para distraer la atención.

Para arrancar, nada mejor que algo de mucho empaque. Desde hace tiempo todo el valencianismo esperaba que rompiera aguas y el presidente Fabra adelantó que hay en marcha gestiones para desbloquear el proyecto del nuevo Mestalla, de la mano de Bankia y quizá otra empresa.



Claro, y como especular es gratis y en los últimos días un grupo de empresarios chinos ha estado en Valencia y visitó Paterna, pues enseguida se apuntó su «intelés en inveltil en el club de Altes Gláficas», que ojalá, ¿no?
Otro. Ayer el tweeter echó humo con el que si sí que si no, que si subo que si bajo, de una hipotética venta de acciones de Juan Soler a Nou Valencia.

Más madera, que es la guerra», como decía el inolvidable Groucho. Puesto que el sábado, en el Ciutat de València, hubo un técnico del Barça, que a lo mejor acudió exclusivamente a ver, pongamos por caso, a Valdo, pues a la prensa de Cataluña le faltó tiempo para poner a Jordi Alba y Víctor Ruiz en la órbita azulgrana. ¡Como si no se hubiera hablado de ambos el pasado verano, antes de empezar la Liga! Aparte del «por si acaso», el Valencia lleva tiempo trabajando en una ampliación del contrato del lateral/interior.
Y para echar la persiana, una realidad palpable. Parejo quiere irse cedido en el mercado invernal, y no le faltan motivos. ¡Claro que esto en unas semanas, con partidos por medio, podría dar un vuelco...!
322. (Publicado en Las Provincias el 11 de noviembre de 2011)

Las intocables (1920-1933)


Ni una palabra más.

9/11/11

Repique de campanas

Los repiques de campanas, litúrgicos o civiles, encierran un lenguaje especial. Unas veces doblan para recordar la oración, otras para convocar a la gente o para resaltar la alegría. A Manuel Llorente le debió de saber a gloria el volteo que ayer llegó al club desde la Generalitat, porque el presidente Fabra hizo público que el Consell y el Ayuntamiento hacen gestiones para que el nuevo Mestalla se pueda acabar cuanto antes, de la mano de Bankia y, tal vez, también de otra empresa.

En ocasiones, si suenan justo a tiempo, las campanas pueden evitar la angustia de besar la lona, y utilizo el símil boxístico a modo de homenaje, hoy precisamente que el mundo del cuadrilátero escuchó el ralentizado tañer a intervalos, en señal de luto por la muerte del gran Joe Frazier.

Como en cualquier otro ámbito de la vida, todo se interpreta según la ideología de cada cual o, probablemente, de sus intereses, y de esta forma, el día después «del debate», dependiendo desde qué acera se observe el panorama, se dirá que fue a uno u otro candidato a la presidencia a quien salvó la campana, a pesar de que la realidad determine que ninguno llegó a estar sobre las cuerdas, como por cierto le ocurrió ayer a Berlusconi en el parlamento italiano, porque allí sí que hubo sonido a difuntos.

Pero aquí hablamos de fútbol y nos centramos en los repiques de campanas salvadoras. Las que ha escuchado Unai gracias a los resultados frente al Getafe, Bayer y Levante, que le han dado vidilla, del mismo modo que sus jugadores, en especial a Feghouli y, en el último partido, a Tino.

En las últimas horas, en el concierto valencianista ha sonado a rebato, un toque civil para dar cuenta de una adversidad: la exclusión de Soldado de la lista de internacionales para los amistosos en Inglaterra y Costa Rica. No es la primera vez que ocurre y al jugador no le queda otra que seguir tañendo el bronce, seguir repicando con sus goles para alertar y dar un nuevo aviso al que ahora no le escucha.


321 (Publicado en Las Provincias el 9 de noviembre de 2011)









8/11/11

Conversaciones de gasolinera

Publicado en Valencia Fruits, nº 2.513 (8-11-11)

7/11/11

Un soplo de aire fresco

En poco más de una semana el Valencia le ha dado la vuelta a una situación que, a pesar de que los números le avalaban, resultaba incómoda para el equipo y para Unai. Habían coincidido demasiadas convulsiones. El Valencia no terminaba de convencer y además algún jugador se había rebotado. Las tres victorias consecutivas frente al Getafe, Bayer y Levante han puesto tierra por medio y se han convertido en el mejor bálsamo para que el equipo afronte el nuevo parón liguero y recargue pilas a tope, porque el inmediato invitado a Mestalla es el líder, Real Madrid.

¿Qué ha cambiado en el Valencia en apenas una semana? Los buenos resultados, un atisbo de mejoría en el juego, que no es poco (¡un soplo de aire fresco!), y el hecho de que Unai haya acertado al obtener respuesta de jugadores que por hache o por be apenas contaban y en un plis-plas han adquirido protagonismo.

En estas circunstancias son normales las alabanzas, pero poco más. Ni éxtasis ni levitaciones. En ese sentido el Levante es un buen espejo, consciente de que la Liga es una carrera de fondo repleta de obstáculos y ni siquiera se ha cubierto un tercio del trayecto.

A Unai, a quien a veces se le indigestan las críticas (algunas las conoce por transmisión oral), se le ha exigido lo máximo desde que aterrizó en Mestalla. Lo mismito que a los otros técnicos, porque además del prestigio, los éxitos del pasado reciente no permiten bajar el listón.

En algo más de tres años en Valencia, el equipo de Unai ha ofrecido luces y sombras, aunque los números le respaldan, sin olvidar las ventas de Villa, Silva, Joaquín o Mata, que aportaban un plus de calidad.

El club trató de ilusionar con Parejo, Piatti , Canales, Rami, Víctor. y aparte de que el madridista está lesionado, sólo la pareja de defensas y el repescado Feghouli han ofrecido lo mejor. Claro que sólo llevamos once partidos de Liga.

-¡Virgencita, que me quede como estoy! -dice mi amigo el valencianista, que antepone siempre los resultados.


320 (Publicado en Las Provincias, el 7 de noviembre de 2011)













6/11/11

Esta Candela si que alumbra!

Candela
3 de noviembre de 2011

2/11/11

El Valencia y Unai salvan el set

Set ball. Aunque todavía queda por hacer, lo de ayer fue un paso adelante. Un importante paso al frente. El Valencia sigue vivo en la Champions, que es lo fundamental, y al mismo tiempo Unai consiguió sacudirse el tremendo agobio que supone el enfado de Mestalla, porque durante el juego escuchó duras críticas, especialmente por la permuta de Piatti por Feghouli. El «¡Burro, burro!» hasta ahora parecía exclusivo hacia los colegiados.

Pero al poco, ¡zas!, que si quieres arroz, Catalina. Los goles hacen olvidar. Está claro que Unai acertó en los cambios. Precisamente con esa modificación y con la siguiente (Alba por Jonas), el equipo se sacudió el agobio alemán y dejó de meter el culo en su portería para ser más ofensivo. Además del triunfo, ayer era fundamental aumentar la diferencia de goles, por un hipotético empate a puntos final, y por segunda vez en la temporada el Valencia ganó por más de un tanto de diferencia.

Pero ahora ya hay que pasar página del partido con el Bayer y pensar en el del domingo, con el Levante. Y también en la lesión de Ever, que tiene mala pinta, aunque hasta hoy no habrá un diagnóstico preciso. Desde luego la ausencia del argentino sería un hándicap importante porque aparte de que atraviesa un buen momento (aunque no tan especial como dicen muchos), Parejo, su teórico relevo, sigue sin contar para el entrenador, porque ayer volvió a ser uno de los descartados.

En ese sentido Unai camina a través de un conflicto de intereses, que año a año se acrecienta por las ventas obligadas para rebajar deuda, y porque algunos jugadores le han generado problemas de orden disciplinario y él ha tenido que hacer de tripas corazón, consciente de que a la larga las lesiones o sanciones le obligarían a echar mano de todos, como ayer de Tino Costa. A Unai se le pueden exigir muchas cosas en el aspecto del juego, pero en ese otro sentido se llama a una puerta equivocada. Él está obligado a poner siempre a los que ofrezcan mejor rendimiento.


319 (Publicado en Las Provincias, el 2 de noviembre de 2011)







1/11/11

Una vía para llegar... o para salir

Publicado en Valencia Fruits, nº 2.512 (2 de noviembre de 2011)

Mis dibujos (73)

El jaque mate

(Del libro "Ropa tendida")

31/10/11

Mis dibujos (72)

El violinista que hubiera querido ser carpintero

(Del libro "Ropa tendida")

Deséame trabajo, no suerte

Un veterano entrenador que hace unos pocos años estuvo al frente del Valencia, cuando antes de un partido alguien le saludaba y pronunciaba la palabra suerte, siempre replicaba que prefería que le desearan trabajo «porque sé hasta dónde puedo llegar, y en cambio la suerte es muy veleidosa».

Aunque la fortuna no es mala compañera de viaje, al Valencia de mañana hay que desearle sobre todo trabajo, porque a pesar de los titubeos que de vez en cuando muestra el equipo, también ha dicho que sabe hasta dónde puede llegar, especialmente cuando hay jugadores que muestran mayor implicación que mostraron en el pasado reciente.

Hace dos semanas, antes del partido de Leverkusen, la única apuesta válida era el hacer piña porque el equipo se disponía a afrontar un partido más que decisivo. Una final. En los encuentros previos el equipo había dado muestras de debilidad y esa ocasión recuerdo que escribí que por las circunstancias no había que poner ni un pero. No era el momento. Había demasiado en juego. Era de las pocas ocasiones en que el resultadismo estaba por encima de cualquier otra consideración.

Ahora sucede lo mismo, pero con acento y tilde añadidos. En aquel partido, a pesar del impresionante arranque, el Valencia acabó contra las cuerdas y desaprovechó una oportunidad que mañana ha de recuperar sí o sí.

Aunque lamentablemente ahora mismo es difícil que Mestalla reviva aquellas noches mágicas en las que no cabía una alfiler en las gradas (Lazio, Fiorentina, Barça, Arsenal.), la presencia del llamado jugador número doce es importante. El equipo lo agradece y lo necesita tanto como el trabajo, que está por encima de la suerte. Visto lo visto, este Valencia no precisa echar mano de la fortuna para noquear a los alemanes. No nos engañemos. Basta con que ponga intensidad.


318 (Publicado en Las Provincias, el 31 de octubre de 2011)









30/10/11

Mis dibujos (71)

Pesca de altura

(Del libro "Ropa Tendida")

28/10/11

De Costa a Costa

De Costa a Costa y tiro porque me toca. Los últimos episodios en el Valencia han puesto a Unai en boca de todos. Al margen del discreto juego pero con el alivio del triunfo que el equipo consiguió en Zaragoza, primero hubo que pasar por la casilla de Ricardo y el incendiario comunicado que elaboraron sus ¿responsables? de imagen, y ayer por la de Tino, como consecuencia de la hostilidad que durante el entrenamiento protagonizó éste y el técnico.

Probablemente Unai se aferrará a que la privacidad en los entrenamientos que acostumbra hubiera evitado que trascendiera el incidente. Salvo infiltrados, nadie lo habría presenciado. Pero ayer, amenazando lluvia y por aquello de que el campo 'secreto' está más que machacado, hubo cambio de escenario y los futbolistas se ejercitaron a la vista de todo el mundo.

Es cierto que los entrenamientos a puerta cerrada con los que se desdeña a los aficionados pueden evitar la visión de los trapos sucios. Pero lo ocurrido también se puede interpretar como que sólo con aparente 'buen rollito' no se maneja un vestuario. A Unai nadie le va a quitar el mérito de mantener al Valencia en puestos de privilegio. Los números le avalan. Pero se espera algo más, aparte de que haya habido demasiados ejemplos, no digamos de falta de autoridad, pero sí de excesiva permisibilidad en los más de tres años que lleva al frente del equipo.

Hay que seguir jugando y Unai ha de mover ficha.


317 (Publicado en Las Provincias, el 28 de octubre de 2011)







27/10/11

Mis dibujos (70)

... y mientras es escuchaba Over the Rainbow

(Del libro "Ropa Tendida")

26/10/11

Mis dibujos (69)

Instrumentos de viento

(Del libro "Ropa Tendida")