31/7/12

Preparación física

Publicado en Valencia Fruits, nº 2.548 (31-7-2012)

24/7/12

Paisajes y paisanajes

Publicado en Valencia Fruits, nº 2.547 (24-7-12)

17/7/12

Recortes y retales


Publicado en Valencia Fruits, nº 2.546 (17 de julio de 2012)


14/7/12

AGUDIZAR EL INGENIO


Siempre hay que estar al loro, pero cuando las necesidades aprietan conviene agudizar más el ingenio. Por eso no ha de haber prisas en fichar. Lo principal es acertar. Y en este caso me viene a la memoria un ejemplo del pasado reciente. En el verano del 99, el que ahora es entrenador del Valencia fue inscrito como jugador blanquinegro minutos antes de que finalizara el plazo.
El fichaje de Mauricio Pellegrino se cerró prácticamente cuando sonaba la bocina. No fue improvisación  sino una maniobra del entonces presidente, Pedro Cortés, que de esa manera abarató la contratación. Claro, hay veces que se apura tanto que se corre el peligro de quedarse compuesto y sin novio. Pero no es el caso.
En ocasiones no queda otra que adelantar los fichajes. Sin embargo no es bueno apresurarse. Ahora mismo hay que pensar que queda suficiente tiempo para cubrir esos tres puestos que se pretenden reforzar: el lateral izquierdo, el centrocampista de contención y el delantero centro.

En cualquier tipo de transacción el comprador no debe demostrar gran ansiedad porque su quien va a vender siempre trata de apretar las tuercas, en ese caso lo haría con mayor motivo, aparte de que de todos es conocido que en la caja valencianista hay suficientes cuartos por la reciente salida de Jordi Alba al Barça. No hay porqué precipitarse, pues, porque  además existen bastantes alternativas para cubrir esas demarcaciones. Eso sin olvidar a ese central que se desenvuelva por la izquierda, aunque al futuro mediocentro se le va a pedir esa doble faceta.

Pellegrino, entre tanto, ya ha bajado al ruedo. El entrenador del Valencia se ha arremangado la camisa y se ha puesto a manos a la obra, mientras que el director deportivo sigue enfrascado en la confección del grupo. En aparente buena sintonía, Braulio busca los relevos de Jordi, Topal y Aduriz, y casi se da por sentado que Tino Costa desoirá la llamada de Unai, aunque su continuidad conlleva que habrá que rascarse el bolsillo para mejorarle las prestaciones.
423 (Publicado en Las Provincias, el 13 de julio de 2012)

11/7/12

LA MEJOR NOTICIA

Los médicos de los equipos de fútbol suelen pronunciarse con bastante prudencia cuando han de establecer fechas de periodos de recuperación de futbolistas que se han lesionado de gravedad. A no ser que, como en muchas veces ha ocurrido, se vean presionados por la sociedad, los técnicos o por los propios jugadores, y hayan de "comerse" algún que otro marrón y decir una mentirijilla, no tienen porqué jugar a ser Sandro Rey y lanzar las campanas al vuelo con inútiles triunfalismos, porque el paso de las semanas los va a poner en su sitio.


Por eso, y porque Jorge Candel es un especialista con vasta experiencia, la mejor noticia que ahora mismo llega al valencianismo es el optimismo que destila el jefe de los servicios médicos del club, pues ha anticipado que el regreso de Éver Banega debe producirse en octubre o noviembre y el de Sergio Canales antes de la Navidad.


Ambos jugadores, por sus cualidades y condiciones, han de ser los encargados de llevar la manija del equipo, los responsables de la construcción del juego, y bastante inconveniente es que durante dos meses de competición el Valencia no podrá contar con ninguno de ellos para lamento del entrenador. Por eso, y porque antes de que ambos pasaran por el quirófano la cosa pintaba pero que muy mal, las recientes declaraciones de Jorge Candel hay que tomarlas como lo que son: la mejor noticia del momento. Éver y Sergio adelantan los plazos de forma considerable, porque la teoría determinaba que hasta enero no estarían aptos para jugar, y eso suponía que se iban a perder la primera vuelta de la Liga y la fase de grupos de la competición europea.


El entrenador, Mauricio Pellegrino, valora la importancia de que ambos estén cerca del grupo como se refleja en el hecho de haya decidido llevárselos al stage de preparación en Alemania, aunque seguro que los va mantener entre algodones, sin forzarlos lo más mínimo. No es cuestión de asumir riesgos. Sobre todo porque el técnico tendrá perfecto conocimiento de la recaída que la temporada pasada tuvo el futbolista cántabro. Es posible que él presionara para adelantar los plazos, pero quienes debían de haberlo frenarlo no lo hicieron y Sergio acabó de nuevo con la rodilla en la mesa de operaciones. Realmente la mejor noticia ha de ser que tanto uno como otro vuelvan en las mejores condiciones.

422 (Publicado en Las Provincias, el 11 de julio de 2012)

10/7/12

Diputados, imputados y puteados

Publicado en Valencia Fruits, nº 2.545 (10-7-12)

VENDER ILUSIÓN, VENDER JUGADORES

La crisis aprieta las tuercas a todo quisque y no es necesario que los expertos nos lo adviertan. Lo sabemos demasiado bien. Si nos referimos a las economías domésticas, basta con que echemos un vistazo a los bolsillos. Pero como aquí hablamos de clubs de fútbol, un buen retrato de la situación aparece en las cifras del mercado de fichajes.


Aunque alguien tendrá de mover ficha, salvo por el traspaso de Jordi Alba al Barça todo está en calma. Da la sensación de que nadie tiene prisa. Parece como si unos y otros se miran de reojo esperando a ver por dónde sale el de al lado. "Por favor, tú primero". "No. De ninguna manera; primero tu".

Esto ya no es lo que era. Con los datos financieros en la mano, la situación del fútbol español es la misma que la del país. Calcadita. Puro reflejo. No hace falta que lo señalen los que manejan las estadísticas porque lo determina la realidad. Como diría un castizo, "estamos bacalaos". Hemos gastado más de lo que hemos ingresado y así nos luce el pelo.


En el Valencia, sin obviar las ayuditas institucionales y bancarias, tratan de hacer las cosas bien, de enmendar errores del pasado. O así lo parece, sin haber hurgado lo más mínimo en el estado de cuentas y, especialmente en el de flujos de efectivo, que tiempo habrá para hacerlo cuando el club haga pública la memoria anual.


Sin embargo a pesar de esa aparente buena voluntad, sorprende que se ponga tanto énfasis en lo de "vender pases", que ahora mismo es una premisa, y se pase de soslayo en lo de "vender ilusión". Nada que ver una cosa y otra. A pesar de que las circunstancias han obligado a las ventas consecutivas de los mejores activos, las compras deberían de aportar algo que enganche al aficionado y, al mismo tiempo, ofrezca consistencia a un bloque que ha de luchar en tres frentes, con la obligación de al menos igualar el pasado reciente.

Ni por asomo se trata de poner en entredicho la calidad de Viera, Pereira y Guardado. Pero después de las salidas de Aduriz, Topal, y sobre todo Jordi Alba, parece que es imprescindible algún nombre que arrastre. Queda claro que la venta de jugadores se sabe hacer. Pero a lo mejor hay que aprender a vender ilusión.
421 (Pubicado en Las Provincias el 9 de julio de 2012)

6/7/12

CAMBIOS DE CRITERIO

Cambiar de opinión no está reñido con la coherencia y, en muchas ocasiones, aunque hay actitudes que nos  sorprenden, la mutación se convierte en un ejercicio sano. Ahora mismo nos asombra el amor de Unai Emery que desde Rusia le llega a Tino Costa, o las flores con olor a Bruno Soriano que Manuel Llorente le envía a Fernando Roig.

La relación entre los presidentes del Valencia y el Villarreal se enturbió en Mestalla la tarde en la que el equipo castellonense prácticamente dijo adiós a la Primera. La sentencia que Jonás impuso en el tiempo de prolongación del partido, fue como para que luego la dirección deportiva valencianista tratara de negociar el fichaje de Bruno del que ya se hablaba.

¡Quién lo iba a decir! Mes y medio después del “no te ajunto” en el túnel de vestuarios de Mestalla, que algunos dicen que casi acaba como el rosario de la aurora, el Valencia va a hacer o ya ha hecho sonar la aldaba en la puerta de El Madrigal, a sabiendas de que para hacer las paces y conseguir un matrimonio de conveniencia le espera el aro. Porque pagar cerca de doce millones por un futbolista de contención de 28 años parece que es bastante.

Las necesidades aprietan. El Villarreal tiene claro que la Segunda no genera lo mismo que la Primera, y el Valencia, aparte del peaje que exigirá Roig, ya sin Topal necesita una alternativa para Albelda, porque la temporada se hará larga.

Entre tanto, a la dirección deportiva le inquietan las cartas de amor que intercambian Unai y Tino, en una romántica situación que contrasta con las discrepancias que mantuvieron en los dos años que han coincidido en Mestalla, por los minutos de juego y titularidad. Y es que sin Banega y Canales hasta pasada las Navidades, Tino se hace imprescindible, aunque él no quiere seguir. O sí, pero con condiciones.

Todo es susceptible de variación. ¿Si Rajoy ha dado tantos tumbos no van a darlos en el mundo del fútbol? Además, lo dice el refrán: el sabio puede modificar su opinión; el necio, nunca.

420 (Publicado en Las Provincias, el 6 de julio de 2012)

4/7/12

ADIÓS, JORDI, ADIÓS

La despedida de Jordi Alba del Valencia entraña una sensación más agria que dulce. Es imposible pasar por alto la necesidad de hacer caja que tiene el club -vender para cuadrar las cuentas, que es una obligación que Llorente dejó clara cuando accedió a la presencia- pero escuece mucho que los buenos futbolistas acaben teniendo un paso tan efímero por la entidad.

La progresión de Jordi está en la mente de todo el valencianismo. En el verano de 2009 convenció a Unai de que podía estar en el primer equipo y el técnico primero le dio su apoyo y luego le reinventó como lateral, posición en la que el chaval ha crecido y ha conseguido galones.

Su salida del Valencia parecía escrita desde tiempo.  Hace casi un año empezó a escucharse el runrún de que el Barça estaba detrás sus pasos y después han coincidido dos circunstancias para su salida. Que se trataba de uno de los jugadores con enorme progresión, de los que cobran menos de lo que rinden, y que su contrato expiraba en junio de 2013 el Valencia se había dormido en los laureles a la hora de ofrecerle la renovación y sellar el acuerdo. Salvando todas las distancias, fue algo similar a lo que le sucedió a con Isco. Cuando el club quiso darse cuenta, el futbolista ya había facturado las maletas.

Probablemente Jordi se hubiera ido de todas formas, pero en este caso el Barça, u otro equipo al que también le hacía tilín, habría tenido que rascarse algo más el bolsillo.

Cuando Jordi se despidió ayer de Valencia pasó de soslayo cualquier cuestión referente a si en su etapa juvenil el Barça le echó o no de la Masía y, como bien nacido, supo agradecer el apoyo que ha tenido en sus años en Mestalla. Desde el de José Giménez, que consiguió que el club pagara seis mil euros al Cornellá para ficharlo, hasta Unai que le reinventó como lateral.

Alegra que Jordi prospere, y aunque haya dejado en caja 14 millones de euros, seguro que se le va a echar de menos porque es un buen futbolista y además un buen tipo.

419 (Publicado en Las Provincias, el 4 de julio de 2012)

3/7/12

Pelotas y cenizas


Publicado en Valencia Fruits, nº 2.544 (3-7-12)

2/7/12

ACERTAR EN LOS FICHAJES

Le quedaban dos años de contrato y bastantes más de estudiar castellano. Después de dos temporadas en Mestalla se ha ido sin saber decir siquiera “¡penalti, lo pido!” (lo de estructurar una oración con sujeto, verbo y predicado hubiera sido para nota). Mehmet Topal ha pasado por el Valencia sin pena ni gloria, pero se ha marchado dejando en la caja alrededor de cinco millones de euros (que es más de lo que costó cuando llegó en el verano de 2010), más lo que el club se ahorra por esas dos temporadas que pendientes.

No se trata de cuestionar la valía del futbolista turco. Pero la experiencia que el Valencia ha tenido con Topal  debería de servir para que la dirección deportiva llevara a cabo una profunda reflexión respecto a los fichajes que se realizan.

Es una situación similar a lo que también debería de tenerse en cuenta, y probablemente ya se tenga, antes de la contratación de otros jugadores que están en la mente de todos. Esos que no tuvieron problemas con el idioma, pero los evidenciaron por un comportamiento fuera de los terrenos de juego que en absoluto fue modélico.
Topal tiene calidad. Eso es incuestionable. Sin embargo en los dos años que ha permanecido en Mestalla no se ha sabido adaptar al club ni al fútbol español, ni el Valencia parece que haya hecho lo suficiente para cuidar la importante inversión económica que significó su llegada. En dos palabras podría decirse que el centrocampista turco tuvo tres encuentros buenos, otros tres decepcionantes y en el resto pasó totalmente desapercibido.
Acertar en los fichajes no es sólo dar con el futbolista bueno, bonito y barato. Es muy importante conocer cuál es el ambiente en que se desenvuelve el jugador, su entorno familiar y de amistades, su carácter, su forma de ser, su fortaleza mental y las posibilidades de adaptación… Todo lo que sea menester para no encontrarse luego con sorpresas desagradables. Sobre todo porque las equivocaciones escuecen más cuando la situación económica de una sociedad es delicada.

418 (Publicado en Las Provincias, el 2 de julio de 2012)